Norcorea participará en los próximos dos Juegos Olímpicos, un nuevo paso de distensión
Kim Jong-Un parece estar en campaña para probar al mundo que la distensión de Corea del Norte va mucho más allá de "los juegos de la paz" celebrados en febrero en PyeongChang, Corea del Sur. El líder norcoreano se reunió durante tres días con el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, en Pyongyang, y ayer, al cierre del encuentro, se estableció que Corea del Norte participará en los Juegos Olímpicos de Tokio en 2020 y en los JJ.OO. de Invierno de Beijing, en 2022.
"El compromiso fue totalmente respaldado por el líder supremo de Norcorea en una discusión muy abierta y fructífera que tuve con él", dijo Bach. "El COI presentará una propuesta para una posible marcha conjunta o posibles otras actividades conjuntas para Tokio y quizás también para Beijing en el momento apropiado", agregó.
La participación norcoreana en Japón distaba de estar garantizada. Pyongyang todavía no se olvida de la colonización japonesa de la península coreana durante la primera mitad del siglo XX y las atrocidades cometidas durante la Segunda Guerra Mundial.
Por su parte, Tokio reprocha al régimen norcoreano el secuestro en los años 1970 y 1980 de japoneses civiles, en general jóvenes, para formarlos como espías. Además, sobre el territorio japonés han sobrevolado muchos de los últimos misiles balísticos de corto y medio alcance probados por el régimen norcoreano.
Según la Agencia de Noticias Central Coreana (KCNA), Bach le dijo a Kim que el motivo del viaje era "expresar los más sinceros agradecimientos" al líder por ayudar a que los juegos de PyeongChang fueran "símbolos de paz". A su vez, Kim le contestó que esa "drástica temporada de deshielo" es "totalmente atribuible a los esfuerzos del COI".
Ambos también hablaron del desarrollo del deporte en Corea del Norte, país que no suele recibir a funcionarios extranjeros, y asistieron a un partido de fútbol femenino. El presidente del COI elogió la reconciliación en curso y declaró que el espíritu olímpico "acercó" a los dos vecinos, que transmitieron "un poderoso mensaje de paz" al resto del mundo.
Los JJ.OO. de invierno en la ciudad surcoreana pasaron a ser un tema de negociación al mayor nivel diplomático entre potencias, luego de que las dos Coreas -en conflicto desde hace más de seis décadas- acordaran desfilar juntas, bajo una misma bandera, en el Parque Olímpico de Hoenggye.
La cita deportiva creó un ambiente favorable para el deshielo entre los países vecinos, tras un 2017 de tensión...
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