Yo no soy Charlie Hebdo - 21 de Marzo de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 561820790

Yo no soy Charlie Hebdo

"¿Ustedes tienen el derecho de criticar una religión? ¿Sí o no?", preguntó. Los jóvenes, de 15 y 16 años, con distintos antecedentes religiosos y étnicos, lo pensaron detenidamente. Sí, respondieron, se puede, pero dentro de ciertos límites. Cauvin escribió en el pizarrón: Racismo. Difamación. Incitar al odio. "Se puede atacar la opinión de alguien, pero no su persona. ¿Entienden el matiz?", preguntó la profesora.

Desde que tres yihadistas franceses de los suburbios de clase trabajadora de París dieron muerte a 17 personas en ataques perpetrados en un área de la capital en enero pasado, la conversación imperante en Francia ha sido similar a aquella que había en la clase de Cauvin. El gobierno galo respondió a los ataques con un aumento de la seguridad, pero también ha puesto su atención en algo fundamental para que Francia se entienda a sí misma como nación: sus escuelas.

Los ataques han puesto a los profesores en la línea del frente, en un país donde las escuelas son consideradas responsables no solo de la lectura y las matemáticas, sino también de inculcar valores morales, cívicos y el concepto del imperio de la ley. Los profesores sostienen que es una tarea difícil, y una en la que las familias y la cultura popular deberían desempeñar un rol, en lugar de depender de la disciplina jerárquica del Estado centralizado.

"En Francia, las escuelas han tenido, históricamente, un rol decisivo en la estructura de la República y de la ciudadanía", señaló Michel Lussault, presidente de un consejo asesor de profesores que ayuda al Ministerio de Educación a desarrollar los planes de estudios. "Esa es la gran cosa con respecto a las escuelas francesas, pero también el gran peso".

El mes pasado, luego de que se informó que algunos estudiantes de las áreas urbanas con problemas se habían negado a participar en un minuto de silencio a nivel nacional por las víctimas de los ataques, el Primer Ministro, Manuel Valls, y la ministra de Educación, Najat Vallaud-Belkacem, dieron a conocer una propuesta, la que ya está en desarrollo, para clases ampliadas de educación cívica, y cuyo eminente título era "Gran movilización de las escuelas para los valores de la República".

El nuevo programa de educación cívica permitiría que las escuelas emprendan una acción disciplinaria contra los alumnos que rechacen los valores escolares. El mes pasado, hubo una polémica nacional después de que una escuela cuestionó a un niño de 8 años que se negó a participar en el minuto de...

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