EL MUNDO BAJO LOS OJOS DE WEIWEI - 10 de Marzo de 2018 - El Mercurio - Noticias - VLEX 705022781

EL MUNDO BAJO LOS OJOS DE WEIWEI

-Creo que Instagram es un vehículo para relacionarse con la realidad. Es una suerte de diario personal -explica Ai Weiwei-. Es congelar el tiempo y lugar en una imagen, que quizás más adelante pueda servir para una exposición.

Su pasión por la fotografía viene de niño y por las redes sociales desde que se iniciaron: cuando partió Twitter, estaba ocho horas escribiendo mensajes, ensimismado tanto como ahora por Instagram. El artista chino más influyente de las últimas décadas, famoso por sus instalaciones, además de ser cineasta, escultor y arquitecto (diseñó el Estadio Olímpico de Pekín), es también una de las figuras más controvertidas del arte mundial, crítico del gobierno de su país y que ha abrazado las temáticas de la censura, la inequidad y la inmigración como principales discursos.

La obra de Ai Weiwei es gradilocuente y controversial. Una de sus primeras exposiciones fue Fotografías de Nueva York, que reunió 10 mil fotografías que tomó en esa ciudad entre 1981 y 1993. Luego, en Dejando caer una urna de la dinastía Han, registra en tres tomas cómo deja caer una urna de los años 206 a.C a 220 d.C. para criticar la excesiva veneración del gobierno chino por su pasado. O la primera muestra que lo hizo conocido: Fuck off,que presentó en el año 2000 en Shanghái, con fotografías de la Torre Eiffel, la Casa Blanca y la plaza de Tiananmén, entre otras, que tenían en común su dedo del medio levantado en primer plano y que fue clausurada por la policía china. Fue un escándalo y también su salto internacional, porque esa muestra, años después, se expuso en el MoMA.

-¿Cómo se siente cuando los críticos de arte lo califican de "genio"?

-No entiendo esa palabra -dice y se larga a reír. -Realmente no entiendo esa palabra. Yo soy muy simple, normal, muy apegado a mi intuición, no tan profundo.

Protagonista

Su visita a Sao Paulo, en octubre pasado, fue para presentar su último documental, Human flow,estrenado en el último Festival de Venecia y donde expone la crisis migratoria (que rodó en 23 países), combinando cámaras profesionales y, era qué no, su celular. Su cinta número 13, que visualmente es apabullante -utiliza drones que le permiten tomas panorámicas donde la gente se ve diminuta- y donde él aparece en cámara, cada cierto tiempo, para hacer alguna reflexión o a veces solo para mostrar sus gestos frente a los testimonios de refugiados, que han recorrido kilómetros a pie o en embarcaciones con tal de llegar a otro país.

Ese trabajo se...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR