Morandi y su relación cercana con los Antiguos Maestros - 28 de Abril de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 780146033

Morandi y su relación cercana con los Antiguos Maestros

Giorgio Morandi (1890-1964) fue un personaje secreto y silencioso. Autor de una pintura en apariencia simple y cotidiana, pero de suma profundidad y de atmósfera metafísica. Se le reconoce como uno de los pintores de naturalezas muertas más innovadores del siglo XX. "Su pintura figurativa se diferencia del arte pictórico de su tiempo por poseer una intensidad, belleza y atemporalidad únicas. Sus bodegones, sumamente personales en cuanto a la composición, cromatismo y luz, llevan al extremo el afán de pureza, concentración y esencialismo del artista", subraya el curador del Museo Guggenheim de Bilbao, Petra Joos.Morandi creó un lenguaje que seduce e influye fuertemente, hasta hoy, en las artes visuales, en el diseño y en la arquitectura. Está en la estética minimalista, subyace en el arte conceptual y reaparece en varios de los mejores artistas británicos de hoy, como el mismo David Hockney o Rachel Whiteread.Pero su personalidad siempre se ubicó muy lejos de los estereotipos de los artistas famosos. Vivió casi toda su vida en la ciudad de Bolonia. Fue el mayor de cinco hermanos y era un hombre tímido e introvertido al que sus tres hermanas menores siempre cuidaron. Viajó muy poco. Solo pasaba los veranos en las montañas de Gissana, en la región de Emilia-Romagna. Vivía y creaba en su casa: permanecía recluido en su dormitorio-estudio, que asemejaba a una de sus naturalezas muertas, rodeado por sus pinturas y objetos favoritos -cajas, frascos y floreros-, y componía sus bodegones de manera sutilmente diversa, con un dibujo que traza las formas esenciales. También nacieron allí sus hermosos paisajes. Tenía en su casa otro preciado tesoro: una biblioteca de arte e historia del arte, que le servirían para iluminar su mirada estética; además de sus conocidas relaciones con sus contemporáneos, con el posimpresionismo, el futurismo y el efímero movimiento de la pittura metafísica. Giorgio Morandi reconoce en 1928: "Los antiguos maestros y modernos me llevaron a considerar con cuánta sinceridad y sencillez habían producido obras vivas y llenas de poesía".Ese capítulo clave y casi desconocido -su relación con los Antiguos Maestros- no había sido estudiado hasta hoy ni exhibido como lo hace el Museo Guggenheim de Bilbao. Más allá de sus comentadas relaciones con El Giotto, Masaccio y Ucello, esta investigación arroja una nueva mirada a Morandi, a través de su arte que, eso sí, siempre "desafía cualquier intento de clasificación", subraya la curatoría...

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