EE.UU. asegura que un misil tierra-aire derribó avión malasio con 298 ocupantes sobre Ucrania
El impacto de un misil tierra-aire hizo caer el avión de Malaysia Airlines que ayer estalló a 10 mil metros de altura y quedó esparcido sobre suelo ucraniano, en plena zona de combate. Esa es la única pista confirmada del siniestro que dejó 298 muertos, de acuerdo con información proporcionada por los servicios de inteligencia de EE.UU.
No está claro desde dónde fue disparado el cohete, lo que generó un cruce de acusaciones entre el gobierno de Kiev, los separatistas prorrusos del este y Moscú, y elevó las tensiones internacionales por el conflicto ucraniano.
El MH-17 de Malaysia Airlines desapareció de los radares cerca de Grabovo, en la región de Donetsk. Las autoridades de Malasia informaron que el avión, que ya había sido alertado sobre el riesgo de volar en esa región no emitió una señal de auxilio. Es la segunda tragedia que golpea a la compañía malasia en apenas cuatro meses, después de la misteriosa desaparición en marzo del vuelo MH-370 con 239 personas a bordo, del que no se tienen noticias hasta ahora (ver notas en A6).
El gobierno ucraniano atribuyó a los grupos rebeldes el derribo del avión y el Presidente, Piotr Poroshenko, lo calificó como "un acto terrorista que representa un desafío para todo el mundo". El Servicio de Seguridad del país habría interceptado una conversación entre el rebelde Igor Bezler y un oficial de seguridad ruso en la que el primero admitía haber tumbado el avión comercial.
Un asesor del Ministerio del Interior ucraniano, Anton Guerashenko, dijo que el MH-17 fue abatido por un misil BUK, "ofrecido a los terroristas por (el Presidente ruso Vladimir) Putin".
Los misiles tierra-aire BUK tienen un radio de 42 mil metros y pueden alcanzar blancos a 21 mil metros de altura. Periodistas de France Presse, al igual que el gobierno ucraniano, aseguraron haber visto este tipo de armamento en manos de los rebeldes separatistas. Según la BBC, los prorrusos afirmaron, en una de sus cuentas de Twitter, haber capturado un lanzador de misiles BUK. Pero habrían borrado el mensaje poco después.
Los rebeldes aseguraron haber encontrado la caja negra en el avión siniestrado y una misión de especialistas de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) -que ha intentado mediar en el conflicto- se dirigió al lugar para examinar su contenido. Los grupos separatistas que controlan la región se mostraron abiertos a una tregua de dos o tres días para permitir el trabajo de recuperación en el lugar donde cayó el...
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