'Mi contribución se medirá por la capacidad de mantener unida a la Nueva Mayoría'
"Me las arreglo bien con un trozo de carne sobre el carbón", asegura el ex titular de la Cámara Alta y actual presidente del Instituto Igualdad, el think tank de su partido.
-¿Cómo le gusta el asado, a punto o bien cocinado?
-Tres cuartos...
-¿Y está más o menos así ya su candidatura a la presidencia del PS?
-Estamos más que bien.
-¿A qué se refiere?
-A que he visitado desde Arica a Punta Arenas y he tenido la posibilidad de captar la idea que hay en la base socialista, relativa a los desafíos del próximo tiempo. Y me siento sintonizado.
-O sea, finalmente irá por la mesa del partido...
-Ese camino está decidido ya.
Escalona dice que su llegada al cargo que hoy ocupa el diputado Osvaldo Andrade dependerá de "la voluntad de los militantes". Y confía en que las elecciones del PS se desarrollen sin "ninguna interferencia", bajo la modalidad y plazos ya aprobados: "Cada militante, un voto, en abril".
-¿Ve algún interés por cambiar esas reglas?
-Como fue tan burdo el argumento (en el pleno socialista de agosto) de que para que no gane Escalona no hagamos elecciones, espero que quienes piensan así convengan en que el mejor método es el ejercicio democrático para resolver la conducción.
Isabel Allende tiene dudas
-Otra candidatura que se perfila es la de Isabel Allende. ¿Competiría con ella?
-Leí sus declaraciones de que está estudiando esa posibilidad. Tiene dudas...
-Usted ya no las tiene...
-No tengo ninguna duda.
-¿Qué relación tiene con la senadora Allende?
-Las relaciones de respeto necesarias entre dirigentes políticos.
-¿Con qué nivel de apoyo cuenta usted entre los parlamentarios del PS?
-Los temas de campaña no los voy a abordar ahora. Cuando el tribunal supremo permita la inscripción de candidaturas, los abordaremos.
-La mayor parte de los legisladores socialistas ha evidenciado distancia con su nombre en el último tiempo.
-Sí, pero aquí el principio de la elección no se va a modificar: un hombre, un voto.
-¿Siente que aún paga un costo por el papel que jugó en el primer gobierno de Bachelet? Algunos lo acusaron de ser casi un comisario de disciplina en el PS.
-Mi posición obedeció a una condición de lealtad. Nunca hice cálculos costo-beneficio.
-¿Ahora tampoco hace esos cálculos?
-En un momento de severo cuestionamiento del sistema político, mi experiencia no es un factor en contra, sino a favor. Estoy por la dignificación de la política, por rescatar la afirmación de que, sin fuerzas políticas respetadas por la sociedad, no es posible la consolidación de un sistema democrático. La tarea que los socialistas sienten en todo Chile es que uno de sus compromisos con la democracia es rescatar su patrimonio histórico, puesto en duda por las tesis refundacionales.
"La farandulización de la política es un cáncer. Me siento en plenas condiciones de hacer frente a los desafíos de fondo que están planteados; no me dejaré arrastrar a la frivolidad que mira las cosas a corto plazo. La lucha contra la desigualdad necesita recuperar la dignidad de la política".
-¿Cree que su figura genera consenso para darle gobernabilidad al partido?
-Yo no miro las cosas así. El PS es un partido democrático, elige...
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