La lucha de las animalistas
En las redes sociales el rechazo y la condena crecieron como una bola de nieve. El tema llegó a ser Trending Topic con el hashtag #JustiaciaparaCholito. El lunes 9 de enero cientos de personas se reunieron para manifestarse en la galería de Patronato y en Plaza Italia. La Municipalidad de Recoleta dijo que tomaría acciones legales. Al día siguiente, Carolina Pino -psicóloga, rescatista de animales y presidenta de la Fundación Suyai- presentó en la Fiscalía de Santiago Poniente una querella contra los agresores.
-Nunca había visto tanta unión de la gente repudiando hechos como este. Cholito representa a los muchos animales que viven sin poder defenderse, y que son víctimas de violencia -dice Carolina Pino.
Jacqueline Bustos, quien fundó la organización Perros Plaza Huemul, quedó impactada con la reacción de la gente.
-Sin importar los credos o la condición social de la gente, todos condenaron el acto -dice y luego agrega:
-Yo me di cuenta de que los perros eran los más desvalidos en este sistema, y la gente se está empezando a dar cuenta de lo mismo. Me siento menos sola en esto.
Carolina Pino, Jacqueline Bustos, Francisca Corral y Fernanda Solari se han convertido en unas de las animalistas más conocidas en las redes sociales con las fundaciones que han creado, para luchar contra el maltrato y abandono de mascotas en Chile, donde hay más de un millón y medio de perros abandonados. Las historias de rescate de estas animalistas son muchas. Cientos. Muchas de ellas tan fuertes como la de Cholito.
La vocación
Carolina Pino recuerda con claridad uno de los rescates que más la han marcado. Fue una noche de lluvia fuerte en la comuna de Huechuraba. Ella venía llegando a su casa y le avisaron que había una perrita recién parida abandonada. Era Greta, un galgo de pelo negro, que había tenido trece cachorros. A pesar de estar desnutrida, había cavado un hoyo en la tierra para proteger a sus hijos.
Carolina Pino salió en auto a buscarla. Le dijeron que estaba al final de la calle Pedro Fontova, prácticamente en la ladera del cerro, cerca de su casa. Se bajó del auto, encendió la linterna de su celular y empezó a buscar a un perro negro en la oscuridad. Hasta que la encontró. La perra apenas se podía sostener en pie. Con cuidado la tomó a ella y a los cachorros, y los llevó a todos esa noche a un hogar temporal.
-Tenía marcas de cortes y quemaduras por todo su cuerpo. Seguramente en la calle la maltrataron y la tienen que haber tenido para carreras...
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