La libertad se desplaza al norte - 29 de Octubre de 2016 - El Mercurio - Noticias - VLEX 652125397

La libertad se desplaza al norte

¿Quién sostendrá la antorcha de la apertura en Occidente? No el próximo Presidente de Estados Unidos. Donald Trump, el nominado republicano experto en agravios, construiría un muro en la frontera con México y rompería los acuerdos comerciales. Hillary Clinton, la probable ganadora el 8 de noviembre, sería mejor en cuanto a la inmigración, pero echó pie atrás en su apoyo a ambiciosos acuerdos comerciales. Gran Bretaña, preocupada por los inmigrantes y la globalización, votó a favor de salirse de la Unión Europea (UE). Angela Merkel abrió las puertas de Alemania a los refugiados, luego sufrió una serie de contratiempos políticos. Marine Le Pen, una populista de derecha, es la favorita para ganar la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Francia el próximo año.

Entre esta compañía deprimente de aquellos que quieren levantar muros, cerrar las puertas de un portazo y alzar los puentes levadizos, Canadá se destaca como una excepción alentadora. Admite sin problemas a más de 300 mil inmigrantes al año, casi el uno por ciento de su población -una proporción más alta que cualquier otro país grande y rico- y lo ha hecho por dos décadas. Su carismático Primer Ministro, Justin Trudeau, quien lleva un año en el poder, ha recibido a cerca de 33 mil refugiados sirios, muchísimos más que Estados Unidos. Puesto que se resiste firmemente a adoptar una disposición proteccionista, Canadá sigue estando totalmente a favor del libre comercio. Grande fue su desaliento ante la lucha de la UE por superar un veto de los valones a la firma de un "amplio" acuerdo comercial que tomó siete años negociar.

Con Trudeau, Canadá está tratando de enmendar su tratamiento vergonzoso de los pueblos indígenas y es probable que llegue a ser el primer país occidental que legalice el consumo de cannabis recreacional a nivel nacional.

!Adelante Canadá¡

De una reputación irremediablemente aburrida, menos temerario y belicoso que EE.UU., Canadá desde hace mucho tiempo ha sido percibida por los extranjeros como un baluarte de decoro, tolerancia y buen sentido. Charles Dickens, perplejo tras una visita a EE.UU. en 1842, encontró alivio en Canadá, donde vio "el sentimiento público y la empresa privada en un estado sano y saludable; nada de sonrojos o fiebre en su sistema". La red de seguridad social de una Canadá moderna es más firme que la de EE.UU.; sus leyes sobre control de armas son más sensatas. Actualmente, en su solitaria defensa de los valores liberales, esta nación...

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