La 'Jungla de Calais' pone en escena el tema migratorio en la campaña francesa
Al entrar por la calle comercial, huele a cebolla y especias, pero "ya no queda nada de la animación que había hace unas semanas, cuando el gobierno obligó a cerrar restaurantes y almacenes", explica a "El Mercurio" Guennoc. Los que subsisten, pese a la miseria, siguen luciendo coloridas fachadas, donde ofrecen, comida halal afgana o brochetas de cordero.
Los habitantes de la "Jungla" se tapan el rostro, y prefieren no dar entrevistas. Guennoc dice que los más amigables son los sudaneses, mayoritarios en el campo. Afganos y paquistaníes son la segunda comunidad más representada, seguidos de eritreos y etíopes. En menor medida se pueden encontrar sirios, iraquíes e iraníes: "No les gusta salir en los medios, porque no quieren dar a conocer su situación a sus familias, por orgullo. Otros tienen miedo de que la policía los vea e investiguen a sus familias, porque muchas veces escaparon del servicio militar. Y otros, tienen miedo de que las autoridades de Gran Bretaña los vean y no les quieran dar el derecho a asilo".
En las portadas
En las últimas semanas, Calais ha vuelto a las portadas. Primero, por la construcción de un muro vegetal de cuatro metros de alto y un kilómetro de largo, levantado a lo largo de la circunvalación que lleva al puerto.
Según la prefectura que solicitó su emplazamiento, con la estructura se busca evitar que los inmigrantes paren a los camiones que se preparan a cruzar La Mancha en ferry. Solo en junio hubo 22 mil asaltos a los camiones, y cuatro migrantes murieron en el intento en julio.
También lo apoya el Reino Unido, que sin ir más lejos lo financia, y que anunció su creación en abril, dos meses antes del Brexit. Las autoridades locales, del partido de Los Republicanos del ex Presidente Nicolás Sarkozy, apoyaban su construcción, hasta que a comienzos de septiembre el gobierno central prometió que la "Jungla de Calais" será desmantelada antes del 21 de diciembre.
A comienzos del mes pasado, también unos 400 habitantes de la ciudad, comerciantes, empleados del puerto y miembros de "Calesianos en cólera", bloquearon la autopista que pasa cerca de la salida del túnel bajo la Mancha para protestar por la presencia de este campamento, que les obliga a reforzar sus medidas de seguridad y que pone en riesgo a los camioneros: "Es verdad que la presencia de los migrantes les trae problemas, como las incursiones en la autopista para bloquear un camión y tratar de pasar al Reino Unido. Pero es una reacción exagerada: la...
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