Irresponsabilidad en patines - 30 de Diciembre de 2016 - El Mercurio - Noticias - VLEX 656491321

Irresponsabilidad en patines

La entrega de los resultados de la Prueba de Selección Universitaria (PSU) 2016 ha permitido apreciar en perspectiva el deterioro que desde 2013 vienen experimentando los liceos emblemáticos, particularmente el Instituto Nacional, en una señal alarmante para la educación pública.

Este año, 16 liceos emblemáticos, de un total de 19, redujeron su puntaje promedio en la PSU. En el caso del Instituto Nacional, entre 2010 y 2013 sus alumnos promediaron 680 puntos en esa prueba, mientras que ahora solo han alcanzado 642 puntos. Esta baja se explica en gran medida por la caída en la proporción de estudiantes con puntajes promedio de más de 700 puntos. En efecto, en esta última versión de la prueba, un poco menos de dos de cada diez estudiantes de este liceo obtuvieron más de 700 puntos promedio en la PSU. En el período 2010-2013 fueron, en cambio, más de cuatro de cada diez estudiantes.

Para acceder a las carreras y universidades más selectivas se requieren, en general, puntajes promedio de más de 700 puntos en la PSU. En la Universidades de Chile y Católica, los alumnos matriculados de liceos municipales son del orden de 25 y 11 por ciento, respectivamente. De estos, un poco más de la mitad viene de cinco liceos emblemáticos, destacando el Instituto Nacional y luego el Carmela Carvajal. La evolución que hemos observado en el último tiempo hace pensar que la porosidad social de nuestra élite se está reduciendo, con claro perjuicio para el desarrollo del país. No hay evidencia respecto de que los cupos que pierden los alumnos de estos liceos en las universidades y carreras más selectivas sean llenados por jóvenes provenientes de otros establecimientos municipales, como piensan algunos. Además, hace diez años eran cuatro puntos porcentuales más los matriculados en estas dos universidades que venían de la educación municipal; es decir, 29 y 15 por ciento, respectivamente.

Esta situación ameritaría una reacción de indignación en el país, pero pese a las señales de incomodidad, no hay manifestaciones que den cuenta de la gravedad de lo ocurrido. El debate respecto de las causas de este deterioro se encuentra en pleno desarrollo, siendo la abundante pérdida de clases que ha existido en los últimos años un factor muy relevante. Hay que pensar que la generación que se graduó de los liceos emblemáticos comenzó sus estudios en séptimo básico en 2011...

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