IPoM en perspectiva - 5 de Septiembre de 2014 - El Mercurio - Noticias - VLEX 526840502

IPoM en perspectiva

Una revisión a la baja en la proyección de crecimiento económico para el presente año realizó el Banco Central en su Informe de Política Monetaria. En esta ocasión situó entre 1,75 y 2,25 por ciento el rango esperado de crecimiento para 2014. Hace un año el mismo reporte pronosticaba un crecimiento entre 4 y 5 por ciento. Ante la magnitud de este ajuste, la discusión de si la desaceleración está causada por factores internos o externos pierde sentido. En otras economías emergentes se ha producido también una desaceleración importante y las proyecciones para 2014 se han deteriorado, pero son de una magnitud mucho más acotada. Por ejemplo, en Perú se esperaba un crecimiento para 2014 en torno a 5,5 por ciento hace un año, y ahora alrededor de cuatro por ciento. Asimismo, la proyección de crecimiento de nuestros principales socios comerciales se redujo de 3,7 hace un año a 3,4 por ciento en el presente.

El grueso de la desaceleración está explicado, entonces, por causas internas. El Banco Central obviamente tiene que ser prudente en sus definiciones, pero no cabe duda de que el llamado de su presidente a sortear la desconfianza apunta a la crisis de expectativas que está detrás de esos factores internos, donde destaca la fuerte caída de la inversión. En la recuperación de las confianzas le cabe un papel fundamental al Gobierno. El ministro de Hacienda ha puesto el acento en que la proyección para 2015 es un rango de crecimiento de 3 a 4 por ciento. Es razonable que insista en que el panorama se ve mejor en el mediano plazo. Con todo, el Banco Central realiza esta proyección, pero advierte que puede tener un sesgo a la baja. Indudablemente que el instituto emisor está pensando en un mejor escenario como consecuencia de los efectos expansivos que pueden tener la depreciación de la moneda, un mayor impulso fiscal -particularmente por medio de la inversión pública- y una política monetaria también expansiva.

Sin embargo, estos fenómenos no son suficientes si las expectativas siguen muy deprimidas. Más allá de sus políticas específicas que están siendo sometidas a un escrutinio propio de las democracias y que generan dudas en la población, quizás el principal "problema" económico que enfrenta el Gobierno sea de otra naturaleza. En muchos actores queda la sensación de que el...

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