La importancia de los incentivos - 18 de Diciembre de 2010 - El Mercurio - Noticias - VLEX 232885598

La importancia de los incentivos

Un ejemplo tradicional son los controles de precio o las políticas asistenciales que, pensadas para apoyar a los grupos de menos recursos, terminan perjudicándolos. De allí que en la elaboración de políticas públicas haya cada vez mayor conciencia de que su diseño mismo debe considerar los incentivos que ella cree, para asegurar que éstos contribuyan a cumplir los propósitos de tales políticas. Pero hay áreas renuentes a analizar los incentivos y que, por tanto, no siempre atienden al diseño de los programas.

Las carencias y los malos incentivos en salud

Así ocurre en salud, como lo ejemplifican diversas instancias. Un caso que ocupó esta semana un espacio relevante en los medios, a propósito del paro de los empleados públicos, es el de los consultorios de atención primaria. Muchas prestaciones fueron canceladas por el paro, pero en días normales, salvo excepciones, la calidad de la atención tampoco es apropiada. Pero, ¿podría ser de otra manera? El financiamiento de los consultorios es independiente de esa calidad. Ellos reciben una asignación per cápita relacionada con la población del área geográfica en que se encuentran, y no por prestación o persona efectivamente atendida. Este diseño institucional difícilmente puede promover una buena atención, porque los incentivos que crea ese modelo de financiamiento no invitan a satisfacer tal propósito. Por cierto, siempre hay quienes tienen una fuerte vocación y centran sus preocupaciones en los pacientes, pero con el esquema de financiamiento actual ése no es el comportamiento que se observará en la mayoría de los casos.

Deben analizarse cuidadosamente, pues, los planteamientos que sugieren modificar la forma de asignar los recursos, para cambiar los incentivos del personal que tiene a su cargo los consultorios. Una reforma limitada, aunque factible de implementar en plazos breves, debería abrir espacios para que las personas puedan decidir, entre la red actual de consultorios, aquel donde desean ser atendidos. Así, los recursos dependerían de la elección personal, y los incentivos se modificarían en favor de los pacientes. En algunos lugares esta flexibilización podría no tener mayores efectos, porque para tener acceso a otro consultorio las personas deberían recorrer una gran distancia. Sin embargo, la mayoría podría elegir entre dos o más proveedores públicos de atención primaria.

Ciertas voces sugieren que los consultorios deberían volver a los servicios de salud -ahora están en manos de...

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