Identidad rural - 14 de Noviembre de 2020 - El Mercurio - Noticias - VLEX 851799642

Identidad rural

"A ctualmente hay dos Colinas: gente que reconoce la tradición campesina y miles que no tienen arraigo al territorio", señala Alberto Larraín, director de Fundación ProCultura, cuando analiza la situación de la comuna con la llegada de los condominios y parcelaciones que en las últimas décadas han proliferado en la zona. La mayoría encerrados en sí mismos, son habitados por gente que poco conoce sobre su patrimonio, y por lo tanto difícilmente podrían hacerse parte de su identidad.Ante este escenario y buscando destacar sus valores materiales y culturales como eje de un desarrollo local sostenible, y que la comunidad los identifique como propios, es que la fundación en conjunto con Anglo American mediante la ley de Donaciones Culturales, se embarcó en una completa investigación -con entrevistas, recopilación histórica, levantamiento de información en terreno y reuniones ciudadanas- que culminó en un diagnóstico patrimonial que abarca su riqueza natural, construcciones, ritos y oficios, y que además incorpora una serie de proyectos posibles para llevar a cabo. Destaca en este sentido la vinculación de emprendedores a través de un sitio web que coordine y potencie las relaciones comerciales y culturales entre ellos; un libro de fotografía y citas de arrieros; o la creación de un museo del Cuasimodo, festividad religiosa de gran convocatoria en la comuna, "una de las más grandes de Chile", dice Larraín.Colina tiene un importante sello rural, legado de la actividad agrícola y ganadera que ha jugado un rol clave en la conformación territorial y social de sus poblados y comunidades. De hecho, durante la primera mitad del siglo XX, las grandes propiedades agrarias eran el principal elemento articulador de su vida social y económica. Se podría nombrar a las haciendas Chicureo, Guay Guay, Santa Filomena -conocida por su medialuna-, Chacabuco -Monumento Histórico-, Lo Arcaya, San Miguel, Peldehue y Quilapilún, entre otras. Esta última actualmente está en proceso de restauración por parte de Anglo American, junto con el parque de especies nativas del mismo nombre que crearon en 2012. Con la fragmentación de ellas, hacia 1920, comenzó un proceso incipiente de desarrollo que perfiló pequeños centros urbanos, pero que aún, dada la baja densidad, permitían un reconocimiento de sus habitantes. El mayor crecimiento de Colina y la gran transformación...

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