El ícono inmortal de la moda
Cientos de turistas caminan silenciosos por la pérgola de tilos podados que rodean el jardín, hoy provisto únicamente con flores blancas, para conmemorar los 20 años de la trágica muerte de Diana. Desde este llamado "espacio de reflexión" se puede ver el Palacio donde la princesa vivió desde que se casó con el príncipe Carlos -el 29 de julio de 1981- hasta su muerte, el 31 de agosto de 1997.
Por estos días, Notting Hill -el barrio que rodea al Palacio, ubicado en el centro de Londres- parece estar de luto. En el famoso Portobello Market, que congrega a millones de personas al año, hay cientos de vendedores de objetos con imágenes de Diana de Gales, y varios de los cafés aledaños aprovechan la ocasión para instalar fotografías de ella. Inglaterra completa se conmueve ante su recuerdo:
la prensa nacional no se ha cansado de publicar anécdotas de su vida y los canales de televisión transmiten regularmente los documentales que han surgido a propósito del aniversario número 20 de su muerte.
Aunque los hijos de Diana -los príncipes Guillermo y Harry- han sido foco de atención, es quizás en el propio Palacio de Kensington donde mejor se le puede recordar. Por primera vez, el lugar abrió sus puertas para exhibir 25 vestidos de una de las mujeres más famosas del siglo XX, en una exhibición denominada "Diana: Su historia en la moda".
La muestra es mucho más que lo que dice su nombre. Es un recorrido por su vida, desde que era una adolescente proveniente de una familia aristocrática, pasando por su evolución como miembro de la realeza británica, hasta transformarse en una "Princesa moderna", divorciada del príncipe Carlos y dedicada al trabajo humanitario.
La tímida Di
Mucho antes de transformarse en la mujer más fotografiada del mundo, la princesa Diana fue lady Diana Spencer, una adolescente aristócrata que tras vivir un tiempo en Suiza regresó a Londres, donde compartió un departamento con amigas del colegio. Por esos días, Diana trabajó cuidando niños y tomó un curso de cocina. Mientras tanto, acudía a eventos sociales para los cuales debía lucir acorde a su nivel social. Y es precisamente un vestido que usó en esa época lo primero que se ve en la exhibición instalada en uno de los salones del segundo piso del Palacio de Kensington.
Justo al entrar, hay una imponente vitrina donde resalta este traje strapless celeste, con encaje blanco, diseñado por Regamus, una popular elección para las debutantes que a principios de los 80 daban sus primeros pasos en el mundo de la moda.
Lady Diana no tenía entonces una gran colección de ropa. Al...
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