Hollywood celebra el medio siglo de tres clásicos inolvidables
Con US$ 966,5 millones recaudados en todo el mundo, la historia del "cachorro humano" Mowgli y cómo es criado como una bestia más de la jungla probó ser, en versión actualizada y echando mano a inéditos efectos visuales (que acaban de ganar el Oscar), un fenómeno por el que no pasa el tiempo.
El éxito de taquilla obtenido por ese renovado "El libro de la selva" no afectó en nada la veneración por el clásico original. Es más, solo la ha potenciado.
Fue el último filme animado que Walt Disney alcanzó a supervisar personalmente antes de fallecer en 1966, y se basa en los libros de Rudyard Kipling, pero fue objeto de múltiples y drásticas alteraciones para su salto a la pantalla. Se eliminaron los aspectos más oscuros de la trama y Disney incluso cambió a los guionistas para que crearan una historia más familiar. Además, en un hecho inédito para la época (aunque muy habitual en la actualidad), la cinta utilizó a grandes nombres en las voces: entre ellos el ganador del Oscar George Sanders ("La malvada") como el temible tigre Shere Khan y el cantante Louis Prima como el rítmico Rey Louie.
La película fue un éxito, convirtiéndose en la cuarta más taquillera del año y la canción "The bare necessities" fue nominada al Oscar.
"El valle de las muñecas"Dirección : Mark Robson.
Elenco: Barbara Parkins, Patty Duke, Sharon Tate y Susan Hayward.
No hay ninguna regla que diga que para que una película perdure y se convierta en un hito deba ser particularmente buena. Cincuenta años atrás, las críticas a "El valle de las muñecas" fueron, derechamente, negativas, pero con el tiempo se convirtió en un objeto de culto, venerado como un clásico sexy del cine. Además, hizo historia como una de las películas más relevantes de Sharon Tate, la actriz y esposa de Roman Polanski que fue salvajemente asesinada dos años después de este filme por miembros de la secta de Charles Manson.
La cinta se centra en tres bellas jóvenes que intentan abrirse paso en el mundo del espectáculo neoyorquino. Sus vidas se enlazan por una obra de teatro liderada por una egoísta y amargada actriz encarnada por Susan Hayward, en un rol originalmente interpretado por Judy Garland, pero del que terminó siendo despedida por el director. Patty Duke, otra de las protagonistas del filme, insinuó pocos años antes de su muerte el año pasado que el cineasta habría ideado una estrategia para deshacerse de Garland. La hacía esperar largas horas y ella terminaba bebiendo hasta emborracharse para matar...
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