Guerrilla de las FARC cierra la lucha armada, luego de medio siglo de conflicto en Colombia
El documento donde se detalló el alcance de la tregua y su implementación dejó constancia de su trascendencia: la guerrilla izquierdista más antigua del continente silenciará sus fusiles para siempre, tras 52 años de una infructuosa lucha por tomarse el poder y que dejó miles de víctimas. En resumidas cuentas, las FARC se comprometieron a entregar las armas y dejarlas en manos de Naciones Unidas, mientras que el gobierno prometió abrirles las posibilidades para construir una nueva vida civil y política.
El Presidente Santos aseguró que en el pacto, "no solamente se acordó el fin de las confrontaciones, sino que también se definió un cronograma preciso para que las FARC dejen las armas para siempre. Esto significa, ni más ni menos, el fin de las FARC como grupo armado".
Mientras, "Timochenko" sostuvo que la tregua deja a las partes "en las puertas de concretar, en un plazo relativamente breve, el acuerdo definitivo que nos permitirá por fin retornar al ejercicio político legal, mediante la vía pacífica y democrática".
En el Centro de Convenciones de La Habana, Santos declaró que era "un día histórico" para Colombia, ya que "después de más de 50 años de enfrentamientos, muertes, atentados y dolor, hemos puesto un punto final al conflicto armado con las FARC". La guerra interna, que involucró a insurgentes, paramilitares y agentes del Estado, dejó un saldo de 260 mil muertos, 45 mil desaparecidos y 6,9 millones de desplazados.
Asimismo, Santos afirmó que el acuerdo final de paz con las FARC se firmará en su país, pero no dio una fecha, aunque ha insistido que lo quiere hacer coincidir con el 20 de julio, aniversario de la independencia.
Aún quedan temas pendientes por negociar, relacionados con la refrendación de los acuerdos para darles soporte jurídico y legal a los mismos, a fin de que no sean reformados por un gobierno posterior.
Sin embargo, el Presidente de Cuba, Raúl Castro, anfitrión del país que ha sido la sede de los diálogos de paz, afirmó que el proceso de paz de Colombia "no tiene vuelta atrás" ante sus colegas de Chile, Venezuela, México, República Dominicana y El Salvador; el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y altos representantes de Estados Unidos y la Unión Europea.
Moderado optimismo
A pesar de la magnitud del texto que conduce a la tregua, en Colombia fue recibido con moderado optimismo, según EFE.
Salvo campanadas que repicaron en la Catedral de Bogotá, situada en la céntrica Plaza de Bolívar, y en otras iglesias...
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