Las gemas de flores de Carolina Yovane - 8 de Noviembre de 2022 - El Mercurio - Noticias - VLEX 913911969

Las gemas de flores de Carolina Yovane

P odría ser una piedra preciosa a simple vista. Los pétalos de abutilones suspendidos en resina y pulidos hasta obtener brillo están enmarcados en piezas de cobre para convertirse en un anillo y una pulsera. La propuesta de la joyera Carolina Yovane en su marca Flora escapa de lo que comúnmente se considera una joya de lujo, pero fue exactamente eso lo que la llevó a ser elegida para presentar su trabajo en la Semana de la Joyería de Milán a fines de octubre:-Yo recojo flores desde siempre. Desde niña me encantaban y al lugar donde vaya, estoy recolectando, cuando camino por mi barrio o cuando estoy de viaje por Chile, así me llevo un pedacito del paisaje. Por eso quise plasmarlas, rescatar su color, su textura -dice Yovane, diseñadora de ambientes y productora de eventos, en una llamada desde el taller en que trabaja en su departamento en Las Condes.Hace solo dos años, con la llegada de las cuarentenas, que comenzó a incursionar en el mundo de la joyería. Algunos elementos han cambiado desde sus sencillas primeras piezas, pero lo que siempre se ha mantenido son las flores. Hoy, entre prensas de madera y antiguas guías telefónicas, su hogar está lleno de pétalos en proceso de secado:-Trato de utilizar siempre flores silvestres y nativas, aunque uso algunas especies introducidas a Chile también. Las convierto en algo similar a una gema. Le doy un valor más allá del que podría tener económicamente, porque quiero que las personas porten belleza. Más que otra cosa, busco belleza y la trascendencia en el tiempo. Una flor que se mantiene eterna.***Cuando llegó la pandemia en 2020, Carolina Yovane encontró, enterrada en su propio departamento, su nueva pasión. Estaba ordenando, cuando vio cajas con algunas de sus antiguas flores secas. Entre ellas, un dedal de oro -o amapola californiana- que recuerda haber recogido a los diez años:-Todo esto coincidió con una etapa importante en mi vida. Me sentí de 20 de nuevo. Estaba encerrada, con mi marido y mis hijos ya grandes, tienen 19, 22 y 32. Fue valioso en ese momento encontrar esto. Más allá de vender algo, fue reinventarme, sentí como que el tiempo no había pasado, me emocioné con esas cosas que ya había vivido antes.También en esos días encontró antiguas joyas de su juventud y ahí quedó claro que lo que necesitaba hacer eran joyas. Comenzó haciendo piezas básicas de mostacilla y alambre con las flores. Luego, buscó cursos online con las orfebres Andrea Silva y Patricia Gallucci.-¿Fue un nuevo...

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