La Fórmula E impacta y entretiene en el corazón de Santiago - 4 de Febrero de 2018 - El Mercurio - Noticias - VLEX 702122125

La Fórmula E impacta y entretiene en el corazón de Santiago

La inusual oferta originó que se viera una mezcla poco habitual. A escasa distancia, entre Plaza Baquedano y el Parque Forestal, alrededor de los 2.470 metros de recorrido convivieron los encopetados visitantes del VIP, fanáticos tuercas, simples curiosos, distraídos que recién ayer se enteraron de la existencia de la Fórmula E y hasta uno que otro fan de Kylie Minogue que buscaba conocer a la cantante, la gran figura internacional invitada por la organización.

Era tal el entusiasmo, que en Alameda con Namur el público rompió una de las mallas negras que impedían la visión de los monoplazas. Colgados de árboles y rejas, la gente buscó hasta el más mínimo resquicio disponible para seguir la competencia, para ver a esos autos que prometían dar espectáculo, pese a que el sonido de sus motores es apenas perceptible.

Y la Fórmula E cumplió. La cuarta fecha de la temporada 2017-2018 de la categoría terminó siendo un espectáculo que satisfizo a todos los que esperaron horas bajo el sol.

Las semanas previas de polémica dieron paso a una de las carreras más entretenidas que recuerden los fanáticos de la categoría, que ofreció al por mayor sus atributos: accidentes, adelantamientos, pelea por posiciones e incertidumbre en el resultado hasta el final.

El epicentro de la acción fue la curva 3, Santa María con Pío Nono. En vez de los carritos con sopaipillas, los dueños del escenario fueron los coches eléctricos, que se movieron agitados al ritmo de los baches, buscando siempre los límites.

En los entrenamientos, varios pilotos se pasaron de largo cuando debían doblar a la derecha, o dejaron el ambiente oliendo a caucho luego de sus fuertes frenajes. En la carrera, fue el lugar elegido para realizar las maniobras de adelantamiento.

Después de más de una hora de acción, el ganador fue el francés Jean-Eric Vergne, que el viernes dio vueltas al circuito pausadamente en bicicleta, pero que ayer aceleró más que sus 19 rivales. Lo secundó su compañero de equipo en Techeetah, Andre Lotterer, en una lucha que hizo vibrar a todos, desde su jefe de filas hasta los anónimos espectadores que sacaron sus celulares para capturar momentos de una competencia que quedará para la eternidad.

89,3 kilómetros por hora fue el...

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