Flancos en el sistema penitenciario - 13 de Diciembre de 2012 - El Mercurio - Noticias - VLEX 410709610

Flancos en el sistema penitenciario

Contrariamente a extendidas percepciones, y con la sola excepción del año 2011, la cantidad de personas condenadas a reclusión ha crecido sostenidamente en los últimos años, especialmente desde la puesta en marcha del nuevo sistema procesal penal en el año 2000. En realidad, Chile tiene una de las tasas de reclusión más altas de Latinoamérica. Sin embargo, los presos están en un sistema penitenciario no sólo aquejado por la sobrepoblación, sino por una anacrónica gestión de los recursos y de la población penal, y con programas de reinserción (salvo excepciones con muy escasa cobertura) ajenos a los criterios de administración moderna y a prácticas de rehabilitación basadas en evidencia empírica. Y si bien existe hacinamiento, es muy dispar entre los distintos recintos públicos, que en conjunto albergan al 80% de la población penal: es moderado en algunos, pero crítico en otros. Ésta es la manifestación más visible de las históricas fallas del Estado en la gestión del sistema penitenciario, y denota que resulta simplista poner el foco únicamente en la capacidad del sistema.

Por su parte, en cuanto a las cárceles concesionadas, dirigidas por un alcaide funcionario de Gendarmería, pero construidas y operadas por privados (salvo en lo relativo a la seguridad), y que albergan al 20% restante de la población penal, el programa emprendido por los gobiernos anteriores no se completó, y si bien originalmente se plantearon justificaciones basadas en la eficiencia del gasto, mejoras en rehabilitación y la reducción de sobrepoblación, hoy el país no sabe cuánto realmente cuesta una plaza en el sistema privado (este diario ha difundido las diferencias de opinión en esta materia entre las concesionarias y el Ministerio de Justicia). No existen estadísticas de cobertura ni indicadores de reincidencia periódicos para medir los resultados de reinserción de cada penal, cuyo cumplimiento, además, es...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR