Cómo la fiscal Chong se encumbra con la investigación de 'causas pesqueras'
La diligencia para tomarle declaración al senador Jaime Orpis (UDI) en su domicilio constituía un paso importante en la investigación de Corpesca. Era octubre de 2015 y, como aún el legislador contaba con su fuero, los persecutores no lo citaron a las oficinas del Ministerio Público. Antes de cumplir el trámite, un equipo de la fiscalía quedó de acuerdo en juntarse en un café.
Cuando llegaron los primeros abogados, uno de ellos le envió un WhatsApp a la fiscal Ximena Chong Campusano -quien llevaba la causa junto al fiscal nacional de entonces, Sabas Chahuán- para que les compartiera las ideas que tenía en mente con miras al interrogatorio, esperando por respuesta alguna minuta con generalidades. La sorpresa fue de todos cuando a sus e-mails llegaron, de manera inmediata, las más de 90 preguntas que Chong tenía perfectamente redactadas para la diligencia.
"Eso muestra lo matea y meticulosa que siempre es para sus causas", recuerda un asistente a esa reunión.
Esa es una de las características que más se repiten cuando abogados, fiscales y gente que ha debido trabajar con ella definen a la persecutora que lleva el caso Corpesca desde sus inicios. Agregan: "seria", "estudiosa".
También a cargo de otras causas de notoriedad pública -como el uso de un avión brasileño en la campaña de Marco Enríquez-Ominami, el caso de proveedores del Ejército y fraude a la Ley Reservada del Cobre, o la arista previsional del caso exonerados, entre otros-, Chong se ha perfilado, para los conocedores, como "la que hace la pega" mientras se desarrolla la pugna entre el fiscal Emiliano Arias y el fiscal nacional, Jorge Abbott, que tensiona al Ministerio Público (ver recuadro).
En medio de la tormenta, esta abogada de la Universidad de Chile de 43 años, casada con quien fuera su compañero de aulas, Danilo Novoa, y madre de dos hijos (de 8 y 20 años) avanza en sus causas con una muy buena evaluación de la Fiscalía Nacional.
Tanto así, que Chong espera ser -a mediados de 2018, cuando se termine el período de Andrés Montes- la fiscal jefa de la Fiscalía Regional Metropolitana Centro Norte. Algo a lo que ya aspiró en 2010, y que reintentará, según muchos pronostican, esta vez con altas posibilidades de éxito.
"El trabajo lo tiene que comenzar desde ahora, porque para llegar a ese cargo es necesario 'convencer' a los ministros de las Cortes de Apelaciones de Santiago y de San Miguel para que luego decida el fiscal nacional", comenta un abogado al tanto del tema.
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