Transportes trabaja en proyecto para el financiamiento definitivo del Transantiago
Mañana es el "día D" para la telefonía móvil. Debuta en todo el país la portabilidad numérica en telefonía móvil, que permitirá a los usuarios cambiarse de compañía conservando su número. La fecha coincide, además, exactamente con el primer año de Pedro Pablo Errázuriz como ministro de Transportes y Telecomunicaciones.
"Me imagino que al comienzo va a venir un boom de gente tratando de cambiarse y, por tanto, va a tener un poco de congestión, pero es un proceso que va a funcionar bien", anticipa el ministro sobre lo que espera de este cambio en telefonía.
Su cartera está movida. Tras la dura renegociación de contratos con los operadores de buses del Transantiago, ahora está en medio de otra negociación, esta vez con el Administrador Financiero del Transantiago (AFT), proceso en que el mismo ministro calificó como "inadecuado" el comportamiento.
-¿Qué fue lo inadecuado?
"Nunca dije que el comportamiento de los bancos había sido inadecuado. El comportamiento del AFT, quiero precisar en la administración. Me gusta separar al accionista. El Transantiago todos sabemos que es un proyecto que a pesar de que tenía una inspiración correcta, tenía muchos problemas de implementación y diseño. Hay que hacer una transformación grande, y eso requiere buena voluntad. Y yo creo definitivamente que la administración del AFT no la ha tenido. A la luz del desafío de transformación que tenemos, he visto mucho más proactivos a los operadores de buses que al AFT. (El AFT) ha sido mucho menos receptivo al proceso. Cuando uno está negociando se necesita apertura, creatividad, aportar. En eso los he visto mucho más reacios, lentos".
-¿Cuál es el modelo al que apunta?
"En el diseño original del AFT existe un error bien profundo, y es que se pasa por intermedio de una sociedad, actividades que le son muy ajenas. Una sociedad que es eminentemente del ámbito financiero se hace cargo de actividades tecnológicas, sin tener necesariamente las competencias. A nosotros nos parece que ese diseño original se puede mejorar haciendo que cada especialista haga su trabajo en relación directa con nosotros. Y no que haya un ente que intermedie la actividad. Estamos en la discusión del modelo contractual final, pero lo razonable es reconocer que hay tres actividades y que uno debe tener a especialistas liderando esas actividades. Y quizá el modelo más óptimo es que cada actividad quede separada con tres actores distintos. O de quedar asociadas, que quede una fórmula de relación que...
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