Un extraño acuerdo sobre sistema político - 6 de Febrero de 2022 - El Mercurio - Noticias - VLEX 895929128

Un extraño acuerdo sobre sistema político

Se dice que la política suele hacer extraños compañeros de cama. Es lo que hoy vemos en la constituyente, donde están convergiendo en la idea de un "presidencialismo atenuado" la UDI, el Partido Comunista y remanentes de la Lista del Pueblo.La tradiciónHistóricamente, un sector de la derecha ha mirado con desconfianza la existencia de un poder fuerte. Su objetivo ha sido debilitar a los jefes de Estado con el objeto de lograr un suave inmovilismo, que sea eficaz para salvar el orden dominante e implementar un programa que se satisfaga con frenar reformas o iniciativas que consideren peligrosas. Entre 1890-1924, esos grupos lograron la casi completa destrucción del poder presidencial, transformando a su titular en un elemento decorativo, alguien que no gobernara y no fuera una amenaza para nadie.Arturo Alessandri creyó poner fin a esa "fronda aristocrática" creando un sistema presidencial. El intento fue un cuasi fracaso, pues lo que resultó (1932-1973) fue un presidencialismo de minoría, con un jefe de Estado que siempre debió lidiar con una oposición que controló el Congreso, dando origen a gobiernos débiles, incapaces de sostener políticas estables.Con el regreso de la democracia, en 1989, reemergió la idea de un sistema político en que un presidente -que aunque fuera elegido por una clara mayoría electoral y en el voto popular conquistara ambas cámaras- pudiera ser neutralizado a través de mecanismos como senadores designados, Fuerzas Armadas con autonomía, un sistema electoral binominal, un exceso de quorum calificado para reformar leyes. No tuvieron el éxito que anhelaban, porque enfrentaron la más sólida coalición de partidos que haya conocido el país, con una disciplina sin precedentes, que eligió sucesivamente cuatro presidentes del mismo pacto, y que en esos veinte años enfrentó unida -y ganó- todas las elecciones presidenciales, parlamentarias y municipales que tuvieron lugar.La fronda parlamentaria: Piñera, ¿ahora Boric?Hacia fines de la primera década de este siglo, el sistema mutó para peor. Los partidos perdieron coherencia e influencia; la disciplina parlamentaria fue reemplazada por agendas personales, y escaló el choque entre el presidente y el Parlamento. Caldo de cultivo fue, otra vez, un presidencialismo donde el jefe de Estado era minoría en ambas cámaras. Piñera, más allá de fallas propias, culmina desafiado por un Parlamento degradado por el extremo desorden de todas las bancadas; que atropelló normas...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR