Empresas concesionarias pagan los millonarios destrozos que dejan las marchas
Él calcula que en la ciudad cada protesta deja destrozos que significan al municipio un pago de $90 millones. "Si sumas lo que se gasta en el año en arreglos por las marchas, son cerca de $700 millones. Con ellos se podrían hacer entre dos y tres centros deportivos, diez sedes comunales para asistir a los vecinos", reclama.
Es que en este municipio dicen que ya no dan más con la destrucción que dejan las marchas en la ciudad porteña. "Dañan nuestros semáforos, escaños, contenedores, cámaras de televigilancia y fachadas de edificios edilicios", se queja el alcalde de Valparaíso, Jorge Castro, quien asegura que está haciendo gestiones para que la cuenta pública del próximo 21 de mayo se traslade al Congreso en Santiago.
Pero en Santiago tampoco quieren más marchas. Tras la de los estudiantes del 28 de mayo, la municipalidad entregó un balance de 17 semáforos y 200 luminarias destruidas y 28 paraderos dañados. El gasto total del municipio llegaría a los $19 millones en reposición de semáforos, jardines y ornato.
Solo en la comuna de Santiago, en mayo hubo 13 manifestaciones (ver recuadro). Tras su paso viene la turba que destruye semáforos, señales de tránsito, casetas de seguridad, basureros y hasta los bancos de las plazas, que son quemados, fundiendo el asfalto. La calle queda como un campo de batalla y el gasto es millonario. La cuenta la pagan en conjunto los municipios y empresas que tienen concesionada la mantención y reposición del mobiliario urbano.
Servicios concesionados
Los municipios concesionan la instalación, mantención y reposición de su mobiliario urbano a empresas como Auter, de semáforos; Apia, de señalética; Citeluz, de iluminación, o Núcleo, en mantención de jardines.
En estos casos, la cuenta de la marcha la paga la empresa que tiene la concesión, pero hay excepciones.
"La empresa contratista absorbe los gastos, pero cuando los daños exceden los volúmenes que están pactados en los contratos, ahí sí que tiene que invertir el municipio", explica Bernardita Lorenzini, directora de Vía y Espacios Públicos de la Municipalidad de Santiago. Agrega que con tres o cuatro marchas semanales no cualquiera las puede solventar y la municipalidad asume un "costo importante".
La semaforización de una esquina tiene un costo aproximado de $20 millones y los semáforos cuestan entre $500 mil y $9 millones cada uno, dependiendo de su tecnología y de si estos tienen cajas controladoras incorporadas.
La respuesta debe ser inmediata, en Santiago...
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