El elefante blanco de la educación
Esa sería la única buena noticia. Desde 2004, una serie de problemas terminaron con la paralización y abandono de las obras que hoy se observa, convirtiéndola en la construcción más larga en la historia de la ciudad y una de las más caras.
Ya se invirtieron, con dineros del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) y el Ministerio de Educación, $3.600 millones , cuando el presupuesto inicial era de $1.800 millones. Y en 2014, el gobierno regional (Gore) de Antofagasta envió un proyecto por $5.300 millones para finalizarla totalmente este año... quizás.
Para Esteban Velásquez, alcalde de Calama, esta obra es el ícono de cómo no deben hacerse las cosas en el sector público.
-Esta es una mochila, una piedra en el zapato.
Para Eduardo Ilaja, en tanto, director de la escuela desde 2004 a 2013, "la obra inconclusa de la D-48 es simplemente el símbolo de la inoperancia".
Cadena de fracasos
En septiembre de 2003, el Gore entregó los fondos para licitar las obras del colegio, que se adjudicaron a la constructora Juan Opazo Ramírez por un monto de $1.895 millones.
El edificio se debía terminar a fines de 2004 , pero en septiembre el Gore detectó problemas, retrasos y errores en la construcción. Se descubrió además el pago de dinero por trabajos no realizados. La justicia responsabilizó al entonces inspector técnico de la obra de la Municipalidad de Calama.
En diciembre, la constructora paralizó, se declaró en quiebra y abandonó el edificio.
En junio de 2008 se retomaron los trabajos. La empresa a cargo fue Ingeniería, Construcciones y Servicios Valle de la Luna, por un monto de $2.644 millones y 330 días de plazo para terminarla.
En 2009 esta firma enfrentó insolvencia económica y retraso en los plazos. Finalmente, en 2010 paralizó cuando ya había un 86% de avance y, con ello, el edificio volvió a quedar abandonado, situación que se mantiene hasta hoy.
Hechos y no palabras
Alicia Mamani, orientadora de la D-48, llegó a trabajar en 1993 y ha sido testigo de la fallida construcción. Durante estos 10 años ha visto cómo los sueños y anhelos se transformaron en pena y resignación.
-Era un sueño esperado por toda la comunidad educativa. Teníamos muchas expectativas, cuenta. Como está a punto de jubilarse, quizás nunca pueda disfrutar del nuevo edificio.
Guillermo Cortés, quien asumió como director en 2014, teme que no puedan contar con jornada escolar completa (JEC).
-La JEC permite extender la cantidad de horas académicas y como nosotros no hemos...
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