Dos años tomará frenar deterioro de valiosa reliquia recuperada de la corbeta 'Esmeralda' - 3 de Mayo de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 568421894
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Dos años tomará frenar deterioro de valiosa reliquia recuperada de la corbeta 'Esmeralda'

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Vincent

En diciembre de 2004 tuvo lugar la última expedición oficial para extraer parte de la estructura de la gloriosa nave. Coincidentemente, el objetivo también fue esta pieza: buzos de la IV Zona Naval de la Armada se valieron de globos de levante para sacar a la superficie esta vez el cabrestante propiamente tal.

El argumento planteado por el Ministerio de Defensa al Consejo de Monumentos Nacionales para que entonces autorizara el operativo fue que el elemento estaba "en situación de particular vulnerabilidad y en riesgo de ser sustraído". El torno estaba ubicado cerca de la proa y se usaba para fondear la nave, izar el ancla, trabajar velas y levantar cañones.

Desde que fue recuperado estuvo exhibido en el Museo Naval de Iquique, pero estaba sufriendo una inquietante corrosión. En septiembre pasado, el Museo Marítimo Nacional, también de la Armada, resolvió trasladar la pieza a Valparaíso, donde se le sometió a una estabilización básica.

Ahora, la jefa del Departamento de Conservación, Doris Valdeavellano, se dispone a iniciar el tratamiento definitivo para frenar su daño. "Estaba en riesgo de deterioro mayor. Se decidió traerlo porque aquí están los especialistas y el nivel internacional de contactos para restaurarlo", explicó.

La experta resaltó que el cambio medioambiental al que está expuesta la pieza de hierro y bronce explica sus grietas y fracturas. "En los 125 años que estuvo sumergida, las sales penetraron en su estructura hasta formar parte de ella. Al sacarla y ante el oxígeno, las sales cambian su estructura química y se cristalizan, aumentando de tamaño", dijo.

Dijo que ello ocurre debido a que fue insuficiente el proceso de conservación al que fue sometido el cabrestante en 2004, consistente en sumergirlo en una solución que fuera extrayendo de a poco las sales. Este debió tomar años en vez de meses, y aunque se le aplicó un barniz que buscó encapsular esas sales internas, el oxígeno consiguió penetrar por las grietas.

El problema es que la técnica estándar está prevista para los objetos históricos o arqueológicos recién recuperados del mar, por lo que Valdeavellano inició consultas con redes internacionales de conservadores para determinar los pasos a seguir. El desafío es mayor, porque el tratamiento, que partirá este mes en la Sala Prat del museo, será abierto al público, por lo que este será testigo de su éxito o fracaso.

"La idea es aplicar el...

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