La disciplina y la formación escolar - 1 de Marzo de 2016 - El Mercurio - Noticias - VLEX 598206822

La disciplina y la formación escolar

La entrada en vigencia -precisamente en el día de hoy- de la Ley 20.845 (también llamada de inclusión), que puso término al financiamiento compartido, a la selección y al lucro, ha originado una importante incertidumbre en los colegios respecto de las medidas disciplinarias que pueden contemplar sus reglamentos internos. Sin embargo, esa perplejidad no surge del texto legal, sino de las declaraciones de personeros del sector, entre ellos de la Superintendencia de Educación, no bien aclaradas por las autoridades ministeriales. Se ha esgrimido para ello una defensa del derecho a la educación de los niños y jóvenes en edad escolar. Pero ninguna de las sanciones que se han condenado pone realmente en riesgo ese derecho. Sin embargo, pueden ayudar a promover la disciplina, tan indispensable para los aprendizajes de los estudiantes.

En efecto, el clima escolar es fundamental para tener escuelas efectivas. En aquellos establecimientos en que este clima está muy deteriorado o debilitado, la posibilidad de observar aprendizajes relevantes se reduce significativamente. A su vez, un buen clima es imposible de obtener sin grados elevados de disciplina. Esta alimenta y al mismo tiempo es alimentada por el desarrollo de habilidades socioemocionales de los estudiantes que, entre otras, incluyen contención, perseverancia, tolerancia a la frustración y empatía con los demás. Los planteles escolares tienen diversos instrumentos para poder articular el logro de estos objetivos. Uno decisivo es el reglamento interno. Por lo demás toda actividad humana está condicionada por un marco regulatorio. Claro que en el proceso de formación de un niño estas reglas son aún más esenciales.

Por cierto, ellas tienen que estar sujetas al respeto de derechos fundamentales. Así, no pueden existir reglamentos que violen derechos básicos o que den pie a discriminaciones arbitrarias. Eso es comprensible y valioso. Chile ha avanzado en este plano en los últimos años de modo significativo. La llamada ley de inclusión ha precisado aún más algunas de estas disposiciones, suscitando alguna controversia sobre su impacto en el clima del colegio. Por ejemplo, las exigencias que deben satisfacer los establecimientos para expulsar estudiantes en casos en que estos amenazan la convivencia escolar pueden ser difíciles de aplicar en la práctica generando...

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