Diputado duerme con una escopeta por temor a nuevos atentados contra campo familiar en La Araucanía
Como cualquier persona, el diputado Diego Paulsen (RN) consulta las fechas en un calendario. El suyo, sin embargo, es particular. Pues algunos días están "marcados" con fotos de tomas, ataques a carabineros e incendios intencionales ocurridos en La Araucanía.
El calendario lo hace una agrupación de víctimas (ver foto). Y se lo envían por mail a Paulsen, por ser parlamentario de la zona. Pero también porque él y su familia conocen de cerca el problema. Muy de cerca.
Un ejemplo es el episodio que Paulsen protagonizó en 2013, cuando se enfrentó a tiros con violentistas que dispararon hacia la casa del fundo "El Porvenir", un predio que su familia tiene en Galvarino (IX Región) desde 1880.
Otra evidencia de su proximidad con el conflicto es la custodia policial que ha tenido en algunos viajes a la zona. Lo mismo que los atentados incendiarios en "El Porvenir". O un nuevo ataque a tiros al mismo campo, hace un mes.
"Mi familia vive lo que les ocurre a miles de personas en La Araucanía. Con un detalle: yo formo parte del sistema que debiera dar la solución. Que eso no se logre es muy frustrante", admite Paulsen (abogado, 28 años), quien cumple su primer período en la Cámara como representante del distrito 49, que incluye a comunas castigadas por el conflicto, como Vilcún, donde asesinaron al matrimonio Luchsinger- MacKay.
Amenaza: "!No vai a vivir más tranquilo, gringo de m...¡"
El cara a cara del diputado con la violencia se prolonga ya durante casi siete años. Y desde un inicio ha estado ligado con el campo de Galvarino, donde vive su abuela Nanny Naulin, quien, como otras víctimas, ha descartado la opción de abandonar su hogar. "!De aquí me sacan muerta¡", le ha dicho.
Antes de que el conflicto entrara en la actual espiral, el congresista y su familia mantenían una buena relación con sus vecinos mapuches. Los ayudaban en las faenas agrícolas o cuando había una emergencia médica nocturna: "Hasta pichangas jugábamos", recuerda él.
Las fricciones se desencadenaron de repente. Fue en septiembre de 2009, cuando unos 40 indígenas irrumpieron violentamente en el predio.
"!No vai a vivir más tranquilo, gringo de m...¡", le espetaron esa vez al padre de Paulsen, antes de quemar una bandera chilena, permanecer cuatro horas en el lugar y amenazar con incendiar el fundo... Lo que con los años ocurrió.
La justicia castigó por el incidente a Reinaldo Penchulef, uno de los autores de las amenazas, según el diputado. La sanción, en todo caso, fue solo...
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