Dilma Rousseff da pie atrás en prometida reforma política directa
Aunque lleva años en el Congreso, el debate sobre la reforma cobró fuerza durante las protestas callejeras de la Copa Confederaciones de fútbol, cuando la Presidenta prometió impulsar un plebiscito para convocar a una Asamblea Constituyente. La propuesta fue rápidamente rechazada en el Congreso, pese a que el oficialismo tenía mayoría.
Legitimidad
La Mandataria revivió la idea de una "reforma directa" durante su discurso de agradecimiento tras la victoria del domingo y ayer se retractó luego de que sus aliados del centrista Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PSDB) insistieran en que la reforma debe ser definida por el Congreso.
"El Parlamento tiene tanta legitimidad para legislar que no necesita ser sustituido por nadie", sostuvo el diputado Eduardo Cunha, posible candidato a presidir la Cámara Baja en el próximo período legislativo, a iniciarse en febrero de 2015.
Entrevistada por la cadena de TV Bandeirantes, Rousseff también reiteró el llamado al diálogo no solo con el Parlamento, sino que además con la oposición, como ya lo había hecho el lunes.
Pero, la oposición dijo que "no dará tregua" a la Mandataria. El senador Aloysio Nunes Ferreira, candidato a Vicepresidente en la derrotada fórmula presidencial de Neves, acusó a Rousseff de "difamar" al PSDB durante la campaña electoral con "mentiras" a través de las redes sociales, que, en su opinión, fueron convertidas en una "cloaca maloliente" con la intención de "destruir a los adversarios".
Los indicios dados por la Mandataria de una mayor disposición al diálogo para implementar reformas económicas, fueron bien acogidos por los mercados que ayer se recuperaron tras la fuerte caída de la víspera. La bolsa de Sao Paulo subió 3,62 %, frente a la baja de 2,77 % experimentada el lunes, mientras que el real se apreció un 2,13 % frente al dólar.
Distintos sectores vienen pidiendo a Rousseff reformas para estimular la estancada economía brasileña -la séptima del mundo y la primera de América Latina- que está en recesión técnica y, por ello, hay expectación por saber quién sucederá a Guido Mantega en Hacienda.
Entre los nombres se menciona a Luiz Trabuco, presidente del banco privado Bradesco, y a Nelson Barbosa, quien ya fue secretario ejecutivo de esa cartera.
"Nadie asegura que una persona como Trabuco vaya a ser el ministro de Hacienda. Es un ejecutivo importante, de un banco de porte internacional, pero personas así jamás considerarían la hipótesis de trabajar con la Presidenta"...
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