A diez años de su chispa inicial, la Primavera Árabe ha pasado de la ilusión a la frustración - 13 de Diciembre de 2020 - El Mercurio - Noticias - VLEX 852961401

A diez años de su chispa inicial, la Primavera Árabe ha pasado de la ilusión a la frustración

Mohammed Bouazizi, un humilde vendedor ambulante de verduras de Túnez, estaba desesperado por la miseria y el acoso policial cuando el 17 de diciembre de 2010 se roció de combustible y se prendió fuego frente a la oficina del gobernador de la ciudad de Sidi Bouzid.Su solitaria protesta y su posterior muerte se convertirían en la chispa de una inédita revuelta popular que -impulsada por primera vez por las redes sociales y los celulares- se expandió no solo por su país sino que a través de casi todo el mundo árabe, y que concentró su ira contra los crueles gobernantes dictatoriales que durante décadas habían parecido intocables. "El pueblo quiere la caída del régimen", fue el grito principal del movimiento que comenzó a ser conocido como la Primavera Árabe -aunque en estas naciones se prefieren los términos "levantamiento" o "revolución"- y que, al menos en sus inicios, representó la esperanza de mayores libertades y democracia en las sociedades fuertemente oprimidas de esa región.Diez años después de la protesta de Bouazizi, sin embargo, hay pocas conclusiones positivas. Tal como la Primavera de Praga de 1968 fue aplastada a los pocos meses por los tanques soviéticos, la mayoría de los levantamientos populares en el mundo árabe terminaron provocando represiones sangrientas, como en Egipto, e incluso guerras civiles, como en Siria, al punto que autores como Noah Feldman prefieren hoy hablar del "Invierno Árabe". Si bien los acontecimientos vinculados al fenómeno provocaron la caída de cinco dictadores que en conjunto sumaban 146 años en el poder, lo que produjo un entusiasmo efímero, hasta ahora el único caso exitoso de una transición democrática es Túnez.La también llamada "Revolución de los jazmines" representó el primer gran hito de la Primavera Árabe, cuando los manifestantes pacíficos tunecinos consiguieron la sorpresiva renuncia, el 14 de enero de 2011, de Zine El Abidine Ben Ali tras 23 años en el poder. El país organizó luego las primeras elecciones libres de su historia para conformar una Asamblea Constituyente -que redactó una Carta Magna de corte progresista promulgada en 2014-, y ya ha elegido a dos presidentes de distinto color político por sufragio universal."Una transición exitosa de un sistema autoritario a uno democrático está muy correlacionada con los niveles de ingresos per cápita, por lo tanto no es de extrañar que Túnez haya tenido éxito, ya que es más próspera que otros países de la región", señala a El Mercurio el...

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