Despidos en sistema de ADP llegan a 45% este año y superan cifra registrada en todo 2010
Actualmente, el proceso de selección a través de ADP se aplica a un total de 1.248 cargos. De éstos, 949 son cargos adscritos, es decir, pertenecientes a ministerios y servicios públicos, son cargos de confianza del gobierno central. Otros 299 son no adscritos, que pertenecen a una serie de organismos e instituciones que utilizan a la ADP para seleccionar algunos de sus cargos directivos.
De los 949 cargos adscritos, 110 son de primer nivel jerárquico, fundamentalmente jefes de servicio; y 839 de segundo nivel, entre ellos directores regionales, jefes de división o equivalentes de los distintos servicios.
En 2010, los despidos para cargos del primer nivel ascendieron a 63% de los puestos que habían sido elegidos por ADP, el mismo porcentaje que registró a los cinco meses de haber asumido el gobierno la Presidenta Bachelet. Distinta es la situación en los del segundo nivel jerárquico. En 2010 se desvinculó en forma no voluntaria al 24% de los funcionarios de dichos puestos, mientras que, en lo que va de este año, dicha cifra ya asciende a 42%.
"Está claro que hay que buscar soluciones y pronto. Las desvinculaciones hablan de un sistema que cuando fue creado, en 2003, no previó que el efecto confianza iba a ser tan grande y ahora es el momento de abordar el tema por vía legislativa", dice Rodrigo Egaña, director del Servicio Civil y presidente del Consejo de Alta Dirección Pública.
Cabe recordar que en septiembre de 2013 el gobierno anterior ingresó un proyecto de ley que perfeccionaba la ADP y que, luego de un año, sigue en primer trámite constitucional. Fuentes de la actual administración señalan que dicha iniciativa no será impulsada por la actual administración y que más bien evalúan ingresar un nuevo proyecto de ley.
El consejo de ADP ya elaboró una propuesta de perfeccionamiento del sistema y luego sostendrán una reunión con el ministro de Hacienda, Alberto Arenas. Las sugerencias incluyen: limitar la facultad de desvincular, especialmente en el segundo nivel, eliminar o restringir la figura de los nombramientos transitorios y provisionales, ampliar el sistema en el gobierno central, regional y local.
Además, entre los desafíos pendientes, Egaña señala que se está evaluando cómo disminuir la duración de los concursos. Hoy, desde la convocatoria al envío de la nómina se demora 85 días en promedio y el objetivo es llegar a no más de 70 días, afirma.
Proyección para 2014
Según las proyecciones del Servicio Civil, los cargos nombrados a...
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