Deserción escolar y ausentismo crónico - 11 de Junio de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 573493566

Deserción escolar y ausentismo crónico

Pese a los buenos resultados que exhibe Chile en materia de deserción escolar, la tasa de abandono del colegio en el 20% de los hogares de menores ingresos es casi diez veces mayor que entre los alumnos del 20% de más altos ingresos.

La tasa de prevalencia en la deserción escolar, medida como la proporción de la población de 20 a 24 años que no ha completado su educación secundaria, alcanza a un 16 por ciento en nuestro país. Esto es menos de un punto porcentual por encima del promedio que se observa en la OCDE. Como referencia se puede señalar que para el promedio de América Latina esta tasa es de 48 por ciento, es decir, supera en tres veces el promedio nacional. Estos buenos resultados cobran aún más perspectiva si se piensa que hacia 1990 esta tasa de deserción se acercaba al 45 por ciento.

Hay una serie de políticas que parecen haber permitido este importante avance, aunque es difícil cuantificar el impacto de cada una. Desde luego el progreso económico y un conjunto de políticas sociales focalizadas han reducido la necesidad de una deserción temprana de estudiantes más carenciados para apoyar a sus hogares. El mecanismo de financiamiento de la educación que rige en Chile, la subvención por alumno, también contribuye a la permanencia de los estudiantes en el sistema, toda vez que crea un incentivo para que los planteles escolares se preocupen de que sus estudiantes asistan a clases. La educación obligatoria hasta cuarto medio también seguramente ha apoyado este logro al igual que políticas específicas, como las subvenciones prorretención y escolar preferencial.

Con todo, mientras en el 20% de los hogares de mayores ingresos esta tasa alcanzaría a menos del 3 por ciento, en el quintil de menores rentas esta proporción alcanzaría a poco más de 28 por ciento. Para seguir reduciendo la deserción se requiere avanzar en al menos dos planos.

Por un lado, que los beneficios de estudiar sean más tangibles. Ello supone una educación secundaria, que es donde se concentra...

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