Declara el 1 de febrero de cada año como el Día Nacional de la Cueca Porteña - Proyectos de Ley - Iniciativas legislativas - VLEX 937434142

Declara el 1 de febrero de cada año como el Día Nacional de la Cueca Porteña

Fecha de registro04 Julio 2023
Número de Iniciativa16073-24
Tipo de proyectoProyecto de ley
Cámara Legislativa de OrigenCámara de Diputados,Moción
Autor de la iniciativaBarría Angulo, Héctor, Camaño Cárdenas, Felipe, Delgado Riquelme, Viviana, González Olea, Marta, Marzán Pinto, Carolina, Mellado Pino, Cosme, Palma Pérez, Hernán, Placencia Cabello, Alejandra, Tapia Ramos, Cristián, Undurraga Vicuña, Alberto



PROYECTO DE LEY QUE FIJA EL DÍA 01 DE FEBRERO DE CADA AÑO COMO EL DÍA NACIONAL DE LA CUECA PORTEÑA



De conformidad a lo dispuesto en los artículos 63 y 65 de la Constitución Política de la República de Chile, lo prevenido en la ley Nº18.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional y lo establecido en el reglamento de la H. Cámara de Diputados y conforme los fundamentos que se reproducen a continuación vengo en presentar el siguiente proyecto de ley:



ANTECEDENTES

El Decreto n°23 publicado en el Diario oficial, el 18 de septiembre de 1979, que declara la cueca danza nacional de Chile señala en sus considerandos:

1º.- Que la cueca constituye en cuanto a música y danza la más genuina expresión del alma nacional.

2º.- Que en sus letras alberga la picardía propia del ingenio popular chileno, así como también acoge el entusiasmo y la melancolía;

3º.- Que se ha identificado con el pueblo chileno desde los albores de la Independencia y celebrado con él sus gestas más gloriosas, y

4º.- Que la multiplicidad de sentimientos que en ella se conjugan reflejan, no obstante la variedad de danzas, con mayor propiedad que ninguna otra el ser nacional en una expresión de auténtica unidad.”

Como bien se puede desprender de su solo lectura, se señalan las características intrínsecas que tiene la cueca para consagrarse como la madre de nuestra danza nacional y como tal es venerada, principalmente, durante las fiestas patrias.

En cuanto a su origen existen distintas teorías y se ha logrado llegar al consenso en cuando a su relación con zamacueca y sus antecedentes arábigos- andaluces.

En el ámbito musical, posee un esquema formal unitario, con una sección repetida que termina formando un fragmento musical de 52 compases, al que se le llama pie. La duración es de aproximadamente un minuto y veinte segundos y su estructura lírica está compuesta por dos estrofas y un remate, con rima en los versos pares.1

Sin embargo, con el paso de los años, el contenido ha ido variando, tanto en compases, contenido, instrumentos, etc. y se comienza a relacionar a las respectivas urbes en donde se canta, como es el caso del puerto de Valparaíso, naciendo la Cueca Porteña, con una cantidad de 48 compases.

Para ello, el profesor Juan Estanislao Pérez, el cultor Jorge Mellado Diaz y el autor de letras Marcelo García Carrera gestores de la presente iniciativa, a quienes agradecemos su meticuloso trabajo de investigación que ha servido de fundamento para la presente iniciativa, nos señalaron lo siguiente:

Valparaíso es un importante centro de difusión de la cueca urbana o citadina, que se manifiesta a través de diferentes estilos que pueden resumirse en cuatro líneas. En primer lugar, un estilo de expresión propio de los conjuntos folclóricos que se caracteriza por ser cantada coralmente a dos voces, acompañada principalmente por guitarras, a las que se agregan arpa y en ocasiones acordeón y pandero, aun cuando estos dos últimos no son instrumentos representativos del campesinado mestizo chileno. La música y letra son tradicionales. La danza tiende ser ejecutada con mucha velocidad, ejemplo de esto, tenemos al “Conjunto Tabáke”. Podemos señalar que el tipo de cueca de estas agrupaciones, tienen una idea no tan lejana de la corriente urbana de la cueca, que da origen a los otros estilos.

Una segunda línea está representada por dúos, tríos y cuartetos masculinos, como “Los Huasos de Millahue”, y nos encontramos también con mujeres solistas poniendo énfasis en expresar un estilo criollo citadino. Valparaíso, fue escuela de conjuntos con solistas femeninas importantes como, Margarita Torres y “Los Cóndores”; Hilda Lira “la criollita”, Silvia “la Trigueña”, “Carmen Corena” y últimamente “Lucy Briceño”, todas ellas siguiendo el estilo instaurado por “Ester Soré”, y luego por “Silvia Infantas”. Esta línea, es sin lugar a dudas, la que mejor expresa el fuerte movimiento del criollismo citadino, plasmado en un estilo de cueca



1 https://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-3510.html

urbana, que puede observarse en la expresión cantada por “Los Hermanos Campos”, que aplicaron una rápida velocidad a su interpretación de la cueca, siguiendo un estilo campesino. Esta corriente se cobija bajo la denominación de “música criolla o típica”, sin precisar las características de ambos nombres.

Las líneas siguientes, surgen aparejadas con cambios sociales y culturales, denominándose “cueca urbana brava, cueca chilenera o centrina”, para diferenciarla de la llamada “cueca huasa”. Como cueca urbana reconocemos una fuerte corriente que busca caracterizar a través de su música y danza, a un tipo de hombre y mujer que no se ajustan a la corriente criolla o típica, creando una separación tajante entre ambas corrientes. La urbana desecha el vestuario campesino o huaso, y crea una coreografía más amplia, expresando una actitud de mayor carácter, más libre y resuelta, en el que la mujer muestra además una forma distinta de expresión en el baile, mucho más empoderada. La música, por su parte, integra nuevos instrumentos además de la guitarra, el pandero se exhibe como un instrumento de rigurosa ejecución, se integran además los instrumentos de percusión que pasan a destacar con mayor fuerza lo rítmico, por sobre lo melódico.



La tercera línea está formada por la llamada “cueca brava”, integrada por agrupaciones masculinas, entre las que sobresalen “Los Chileneros”, “Los Centrinos”, “Los Chinganeros”, y otras con compositores e intérpretes representantes de una clase social conformada por trabajadores del Matadero y la Vega Central de Santiago, y obreros y feriantes de Valparaíso, entre ellos sobresalen los santiaguinos “Hernán (Nano) Núñez”, “Francisco Salgado” y “Fernando González”, entre otros destacados compositores e intérpretes. En la importante representación porteña destacan cantores y compositores como “Juan Pou”, “Elías Zamora”, “Carlos Navarro”, “Osvaldo Gajardo”, y muchos otros relevantes representantes, que tenían como uno de los centros de reunión permanente el “Bar Nunca se Supo”, ubicado en la calle Chacabuco, cerca de la Avenida Argentina, además de otros bares y “picás”. Su diferencia respecto de la “cueca huasa”, es principalmente en el canto, el cual se caracteriza por ser interpretada básicamente solo por dos, tres o cuatro hombres, acompañándose de guitarra, piano o acordeón, y pandero.

La cuarta línea es la que corresponde a la “cueca urbana porteña, o cueca porteña, cueca de puerto, de la orilla”, que es muy anterior a la cueca brava, y con características diferentes respecto de ella, entre ellas se encuentra que no necesariamente se canta intercambiando siempre las voces primeras y segunda,

manteniéndose esas voces siempre desde sus inicios hasta su final; otro aspecto a destacar es que sus intérpretes fueron los primeros en utilizar la batería en sus presentaciones; usan además, siempre pandero y acordeón. Este estilo de cueca sobresalía en los bares y “picás” en donde se cantaba. Sus letras tienen un carácter más poético que la brava y se cantan en una velocidad más lenta que aquella, posibilitando un fraseo distintivo que la caracteriza, además de que su baile tiene un sentido más de encuentro en la pareja, que de competitividad que caracteriza a la cueca brava y a la cueca chora, abriendo una marcada diferencia que puede observarse al ver bailar a las parejas de uno u otro estilo.

Su estilo musical interpretativo es claramente influenciado por la ciudad puerto, que contribuye a esta cueca particular y única con sonidos (arreglos) y ritmos como el tango, el vals peruano y el bolero, todos estos remozados y muy bien ejecutados con músicos de gran categoría, como por ejemplo, Don Juan Pou, quien con su guitarra, le da un carácter exclusivo de esta cueca.

Actualmente, son pocas las agrupaciones que en lo musical, tratan de salvaguardar con sus creaciones este estilo de cueca, agrupaciones tales como “Los Afuerinos”, “Savia Porteña”, “Puerto Bohemio”, “Los Caballeros de la Cueca”, “Las Joyas del Pacífico”. En lo dancístico, hubo talleres que rescataban este estilo único de cueca, sin embargo, hoy sobrevive solo el “Taller de Sol y Beno”, que utiliza exclusivamente la rítmica típica de la cueca porteña.

En resumen, la cueca denominada porteña es la cueca de más alto grado de representatividad de Valparaíso que hoy tiende a perderse, lo que hace necesario su rescate trabajando con las agrupaciones de cantantes para mantenerla vigente.



INTÉRPRETES MUSICALES DE CUECA PORTEÑA





AÑO DE CREACIÓN

NOMBRE

1981

LOS AFUERINOS

1991

LOS PALETEADOS DEL PUERTO (AGRUPACIÓN YA DISUELTA)

1995

LA ISLA DE LA FANTASÍA (AGRUPACIÓN YA DISUELTA)

2000

LOS CABALLEROS DE LA CUECA

...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR