Cumbre estratégica - 22 de Noviembre de 2021 - El Mercurio - Noticias - VLEX 878443515

Cumbre estratégica

Y así pareció haber sido. De ambos lados se apreciaron como conversaciones "francas y directas", un "debate saludable" o una "buena reunión", como resumió Biden. Para Xi Jinping era un encuentro con un "viejo amigo", y recordó sus conversaciones cuando Biden era vicepresidente. Si bien el ambiente fue "cordial", el norteamericano se resistió a llamarlo también su "amigo". El diálogo no dejó fuera los temas más peliagudos, esos que han enfrentado a Washington y Beijing los últimos años, y que no podían resolverse de inmediato, pero -dijeron- se abrió el camino para que los diplomáticos negocien.La tensión entre las potencias rivales escaló durante la administración de Donald Trump y su "guerra comercial", pero no decreció con la llegada del demócrata, en parte porque, más allá de líneas partidistas, Estados Unidos ve que la emergencia de China es una amenaza para su economía, su industria y el bienestar de sus trabajadores. Biden planteó claramente su postura: "Nuestra responsabilidad como líderes es asegurar que la competencia no se transforme en conflicto, intencional o no intencional".Pero el asunto no es solo comercial. El poderío militar creciente de China (que incluye arsenal nuclear) cambia los equilibrios estratégicos. Por eso, Taiwán, y los conflictos del Mar del Sur de China fueron debatidos ampliamente. Estados Unidos tiene el compromiso de entregar medios (o sea, armas) a Taipéi para su defensa. Se supone que eso no incluye una acción militar norteamericana, pero siempre ha existido ambigüedad en su política porque podría, ante una eventual invasión china, prestarle más que apoyo moral. Beijing exige que Washington reafirme su línea de no reconocer una declaración de independencia de Taiwán, considerada por Beijing una "provincia rebelde" que debe reincorporarse al territorio continental. En declaraciones posteriores a la cumbre, a Biden se le escapó que "Taiwán es independiente".La persistencia de las tensiones en la región quedó en evidencia el jueves, cuando guardacostas chinos dispararon cañones de agua contra barcos filipinos en la zona de reclamaciones superpuestas en el Mar del Sur. Washington consideró que el incidente afectaba la "paz y estabilidad regionales", y advirtió que un ataque armado contra Filipinas podría gatillar la intervención norteamericana, de acuerdo con los compromisos de defensa mutua.¿Boicot diplomático a los Juegos Olímpicos?Las violaciones a los derechos humanos en Xinjiang han sido tema...

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