Crece llegada de sirios , mientras el Gobierno no ejecuta aún su plan para traer refugiados
La mayor parte viene de Homs: el mismo lugar desde donde provino la inmigración siria de comienzos del 1900 y que dio origen a una comunidad chileno-siria que hoy se estima en unos 40 mil habitantes.
Aunque no son grandes cifras, hay una tendencia creciente en el flujo. Según datos de la Cancillería, las visas tramitadas en los consulados chilenos en Damasco y en otros países subieron de 51 en 2011 a 230 en 2015. En los últimos cinco años, se han otorgado 572 visas, de las cuales el 76% corresponde a turismo, un estatus que en Chile se puede cambiar luego por un permiso de trabajo.
A su vez, en Extranjería del Ministerio del Interior las visas otorgadas a ciudadanos sirios subieron de 12 en 2011 a 55 en 2015; más de la mitad de ellas son laborales. También aumentaron las permanencias definitivas otorgadas, de dos en 2005 a 22 en 2015.
Muchos de ellos forman parte de un éxodo forzoso, pero no llegan a Chile como refugiados. Solo 24 han pedido este estatus una vez que están en el país.
El programa incluirá vivienda y salud
Mientras tanto, ya han pasado dos años desde que la Presidenta Bachelet se comprometió en la ONU a evaluar un programa que trajera refugiados sirios desde campamentos para reasentarlos en Chile, idea que confirmó en la asamblea ONU de septiembre de 2015. Un año después, el plan está listo y consensuado entre Interior y Cancillería, con todos los detalles sobre cómo debe implementarse para traer a 120 personas y lograr su integración, asegura el jefe nacional de Extranjería y Migraciones del Ministerio del Interior, Rodrigo Sandoval.
Sin embargo, no se ejecuta aún por falta de recursos. A diferencia de un plan anterior para 117 refugiados palestinos, en que Chile se sumó a una propuesta financiada por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para Refugiados (ACNUR), esta vez la iniciativa es del Estado de Chile, que gestiona un presupuesto compartido (con una parte estatal y otra que vendría de ACNUR, gobiernos extranjeros y organizaciones).
Sandoval dice que el programa tiene un costo de US$ 4 millones por los dos años que duraría, en que se entregaría vivienda, salud, asistencia laboral y económica, y apoyo psicológico. Implica un acompañamiento a los refugiados que Chile irá a buscar a campamentos de Líbano y Jordania.
Solo se ha logrado reunir el 50% del financiamiento. En Interior no quieren dar una fecha, pero en la Cancilleria afirman que el programa se aplicaría entre 2017 y 2018.
Factor seguridad, clave en la...
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