Crece debate por impacto de la crisis de los principales operadores del Transantiago en futura licitación
Fuentes del Ministerio de Transportes reconocen que esa preocupación ha estado presente en las discusiones previas a la relicitación de los actuales contratos, tras varios viajes a Europa del ministro Andrés Gómez-Lobo, del subsecretario Cristián Bowen y del secretario ejecutivo del proceso, Carlos Melo, para captar la atención de operadores internacionales.
La estrategia del Ejecutivo apunta a aumentar las actuales siete unidades de negocio a doce, cada una con más de 500 buses, para mejorar la capacidad de gestión de los futuros concesionarios.
Falta de confianza
Sin embargo, según el gerente general de Subus, Andrés Ocampo, la crisis de su empresa y la de Alsacia es un problema para las nuevas licitaciones. "Lo que se arma es como una incerteza jurídica, porque se tienen contratos y comienza a discutirse si algunas cosas contractuales se pueden o no se pueden hacer valer. Eso es lo que desincentiva la entrada de operadores nuevos y va a impactar en el precio. Al final, las tasas de retorno que se van a exigir sobre proyectos totalmente riesgosos en términos jurídicos van a ser muy altas".
Ocampo también percibe un posible daño en la confianza de la banca internacional: "La banca local nunca le ha creído al sistema y con todos estos problemas le va a creer menos. A la banca internacional no ha hecho sino golpearla".
El especialista en transportes Louis de Grange es más pesimista y cree que el Gobierno ni siquiera podrá sacar adelante la licitación. "Esto debió comenzar al inicio del Gobierno, y no con dos años de retraso. Toda la incerteza y la incapacidad de las autoridades de transportes generan incertidumbre y van a incidir en futuras propuestas, porque además se les va a exigir capital a las empresas. Santiago puede ser una ciudad atractiva porque es grande, pero el robo que implica la evasión del 30% y la caída de pasajeros generan un gran desincentivo", plantea.
A juicio del ex coordinador de Transantiago Raimundo Cruzat, para eliminar las incertidumbres hay que modificar de raíz los contratos. "Las bases deben generar garantías, con reglas bien claras. Si se licita el sistema como es hoy, no va a llegar nadie. Pero si se corrige, puede ser atractivo porque es una ciudad de seis millones de habitantes. Es necesario eliminar incentivos a la evasión".
Para rediseñar el Transantiago la autoridad evalúa la opción de generar un inicio espaciado de las 12 unidades de negocio, de modo que la renovación contractual y los cambios...
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