El corazón del mejor té - 28 de Junio de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 576000394

El corazón del mejor té

Darjeeling es una ciudad colgada de las montañas. Tan bajas como humildes, sus casas trepan a las empinadas laderas que forman la antesala misma de los altísimos Himalayas. Apenas más allá, tras esas pendientes invadidas de viviendas, se ven las nieves eternas de algunos de los picos más altos del mundo, entre ellos el Kanchenjunga cuya cima se levanta hasta los 8.586 metros sobre el nivel del mar. Motivados por esta proximidad, muchos montañistas llegan hasta Darjeeling para aclimatarse a la altura antes de iniciar la conquista de esos montes descomunales en los que habitan las leyendas. Sin embargo, la fama de Darjeeling no está ligada a esas grandes cumbres, sino que a su magnífico té negro, considerado uno de los mejores de todo el mundo.

Obtenido de una variedad conocida como Camellia Sinensis Sinensis, este té se cultiva en unas plantaciones que se extienden sobre las faldas de las montañas como preciosos jardines (razón por la que se las llama tea gardens). En Darjeeling hay casi noventa de esos jardines, que ocupan una superficie de 17.500 hectáreas y de los que se cosechan diez toneladas anuales de té.

Esas son estadísticas. Lo que se ve en los mismos campos es que esa cosecha se hace de forma manual por recolectores que en su mayoría son mujeres llegadas al norte de la India desde la vecina Nepal, muchas de las cuales son el principal sostén económico de su familia pese a que cobran unos pocos cientos de rupias (apenas unos dólares) al mes. Por lo general, la escasa paga se compensa con otro tipo de gratificaciones que van desde viviendas sin costo de alquiler hasta raciones diarias de cereal y prestaciones médicas gratuitas.

Trabajando junto a sus madres, Chandra y Savitiri reciben poco más de mil rupias cada una al mes, algo así como diecisiete dólares, que alcanzan para sobrevivir. Ambas saben que es poco para un trabajo muy duro, que en tiempos de cosecha las obliga a cortar brotes y a cargar durante no menos de diez horas diarias una canasta de bambú que al llenarse de hojas puede llegar a pesar entre quince y veinte kilos. Pero ninguna se queja porque creen que tener un trabajo y una vivienda es una bendición.

A lo largo del año en Darjeeling hay tres diferentes épocas de cosecha. En la primera, que tiene lugar a mediados de marzo, se obtiene un té con mucho cuerpo y un intenso tono rojizo que es considerado siempre el mejor de toda la producción anual. La segunda colecta se lleva a cabo en la época de lluvias de junio y...

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