Confección de uniformes escolares es la excepción en la alicaída industria textil chilena
Esta tendencia a individualizar el vestuario de los alumnos comenzó para los uniformes deportivos -buzo, polera y short-, pero en los últimos años se ha extendido al resto del vestuario escolar y ha llevado a que cada vez más planteles -no solo los particulares pagados- decidan cambiar las camisas y blusas por poleras de piqué, y los jumpers por faldas de vistosos diseños.
En Chile, el uso del uniforme escolar se implementó para ayudar a la economía del hogar, por la estandarización de la vestimenta que conlleva su utilización. Su uso obligatorio lo pueden establecer los directores de los establecimientos educacionales que cuenten con reconocimiento oficial, siempre y cuando estén de acuerdo el centro de padres y apoderados y el consejo de profesores. Además, se debe realizar una consulta previa al centro de alumnos(as) y al comité de seguridad escolar, según explican en la Superintendencia de Educación.
Con el tiempo, la confección de uniformes escolares ha proliferado y actualmente existen muchas pequeñas y medianas empresas dedicadas a este rubro. Se trata de una excepción entre las textiles que han tendido a desaparecer en Chile producto del aumento de las importaciones provenientes de Asia, y que han reemplazado la producción nacional. Aquí, tres historias de empresas que tienen décadas de trayectoria en la confección escolar y que han logrado mantenerse vigentes pese a la alta estacionalidad que marca este negocio y la irrupción de las grandes tiendas como una fuerte competencia.
Panelco: 90% de las ventas en temporada alta, a partir de febreroUniformes Panelco nació en 1985, dedicándose a los uniformes escolares en general. Dos años después, evolucionó a los uniformes específicos. Sus productos son realizados con telas nacionales, el 80% de su producción la realizan en talleres externos y el resto, en un taller de su propiedad, donde trabajan 12 personas para la confección. La empresa también mantiene su stock durante todo el año.
"La gente prefiere la calidad. Ese es nuestro nicho de mercado, el cliente que apunta al uniforme de calidad más que al barato", declara Claudio Waddington, gerente de Producción de Panelco.
Panelco produce uniformes estándares y específicos. Waddington explica que realizar un uniforme estándar es más barato, porque la tela es más simple y la confección es más fácil. "No es lo mismo un jumper que una falda que lleva pliegues, es más tela. Y no es lo mismo cortar una tela escocesa, una tela con diseño, que...
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