Los cocuyos - 20 de Junio de 2016 - El Mercurio - Noticias - VLEX 643136933

Los cocuyos

En esa noche que se instala en la memoria colectiva debido a un suceso inusual y anormal, porque selección estuvo mágica, maravillosa y encantada.

El viejo equipo que forjó Marcelo Bielsa. El que se estrelló con Claudio Borghi.

El que maduró con Jorge Sampaoli. Y el que ahora se acostumbra a la administración de Juan Antonio Pizzi.

Regresó el antiguo equipo cuando nadie lo esperaba, porque venían remolones, mediocres, desgastados y disgustados.

Y de repente el corrido y la ranchera chilena.

A los mexicanos se les vino encima la letra de "Me caí de la nube" de la afamada Lola Beltrán. Estaban en lo que era esponjoso y soñador, y en vez del salto cualitativo se fueron guarda abajo y se despachurraron en la cancha de pasto.

Los jugadores chilenos merecen un potpurrí con temas conocidos del tipo "Cucurrucú paloma", "Me he de comer esa tuna" o "Amor con amor se paga", porque el fútbol después de una goleada histórica es puro abrazo, elogio y ritmo.

Para la selección de México fue el Día de los Muertos y para la de Chile fue algo sobrenatural que merece ser guardado en escabeche, porque jugaron como poseídos, la tocaron con magia y parecían hechizados.

Y a Juan Antonio Pizzi le dedicamos la tradicional canción mexicana "A la luz de los cocuyos", para que se inspire, nos traduzca el equipo y nos explique lo inexplicable, pero de a poco y siempre y cuando le sea posible.

¿Por qué un día somos tan erráticos como Clark Kent y al otro nos convertimos en Superman?

¿Se puede jugar tan equivocado un viernes 10 y tan divino un sábado 18?

¿No seremos mutantes, acaso?

Que Pizzi nos diga lo que quiso hacer en los cuatro partidos y...

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