Menos deserción y buen clima escolar son los beneficios de involucrar a la familia en la educación
Angustiada ante la idea de no tener las herramientas para ayudar a su hijo a entender la importancia de educarse, Marisela, dueña de casa, recurrió al programa que desde mayo ejecuta la Fundación Cerro Navia Joven con apoyo de Telefónica y la Vicaría de la Pastoral Social y de los Trabajadores. Su objetivo es justamente evitar la deserción escolar a través de talleres para apoderados que refuerzan el valor positivo de la escuela y previenen el trabajo infantil.
"La fundación concibe que un joven ve aumentadas sus posibilidades de futuro con una familia que se compromete en el proceso educativo. Como entendemos que parte del fracaso escolar pasa por la falta de vínculos entre la escuela y el niño, buscamos que los padres sean un puente que de cierta forma ayude a conectar eso", comenta Niniza Krstulovic, directora ejecutiva de Cerro Navia Joven. En la comuna son 14 las mujeres que dos veces a la semana participan en el taller, donde conversan con psicólogos mentores y aprovechan de aprender sobre algún oficio. Se dictan clases de pastelería, por ejemplo. "Así uno se entusiasma con aprender y contagia a los hijos", comenta Marisela Sandoval.
En efecto, dice Krstulovic, la idea pasa por fomentar el estudio a través del ejemplo y la autovaloración de los padres.
"El apoyo familiar juega un rol clave en prevenir el abandono escolar, demostrando su efectividad en disminuir la tasa de deserción a largo plazo. La literatura nacional también destaca el efecto positivo del involucramiento en el desarrollo cognitivo, social y emocional de los niños, identificando como principales áreas de impacto el desarrollo del apego y clima escolar, además del incremento en logros de aprendizaje", indica Mahia Saracostti, editora del libro "Familia-Escuela-Comunidad" e investigadora del departamento de Trabajo Social y del Magíster en Estudios y Desarrollo de la Familia de la Universidad de la Frontera.
Convivencia
Mejorar el clima escolar no es un tema menor en un país donde las últimas cifras del Simce muestran que 30% de los alumnos de 4° básico de los colegios municipales dice estudiar en un ambiente poco seguro. En 6° básico, el 21% de los estudiantes de estas escuelas percibe que existe una mala convivencia en su establecimiento.
"En Chile hay conciencia sobre esto, pero en la práctica es poco lo que se hace", comenta Ruth Navarrete, directora ejecutiva de Fundación CAP. Allí promueven el programa Aprender en Familia, que desde 2010 ha trabajado con 60...
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