La clase magistral de Susana Claro
La idea, dice mientras ayuda a ordenar los computadores en los que acaban de trabajar los estudiantes a los que investiga, es aprender a desarrollar y medir la motivación escolar y así mejorar la calidad en la educación chilena
-Me interesa cómo podemos fortalecer en nuestros estudiantes una motivación persistente, resiliente, una motivación que perdure a través de los obstáculos. En inglés se dice grit, que se traduce como "pasión y perseverancia". Para esto analizamos el propósito que tienen los estudiantes para su vida y el estudio, las creencias que tienen sobre sus propias habilidades y si tienen mentalidad de crecimiento. También la actitud ante el fracaso, su identidad y el sentido de pertenencia a la comunidad escolar -dice.
Susana Claro habla con pasión: profundiza sobre lo que, cree, mueve a los alumnos, la realidad que los profesores enfrentan en el aula día a día y las fortalezas de aquellos que desarrollan una mentalidad de crecimiento. También da cifras y confronta realidades: podría estar un día entero hablando de esto.
-Hay ejemplos de culturas con motivación resiliente. En Finlandia suelen hablar de sisu. Es una palabra que representa la esencia del finlandés, lo que los identifica. Si lo googleas te sorprenderías, es difícil de traducir, representa perseverancia y fortaleza ante la adversidad. Los finlandeses han crecido en la adversidad y no se rinden con nada. ¿Pero sabes qué? Los chilenos también tienen su sisu. Hemos crecido entre terremotos, crisis, miles de situaciones que nos han formado un lado resiliente. Pero no lo aplicamos tanto a lo académico, tendemos a creer que tienes que ser tocado por una varita mágica para ser bueno para matemáticas. Y no es así. El cerebro nació sin la habilidad de leer y logramos desarrollarla y leer. Así pasa con muchas habilidades, incluso con las socioemocionales, como el manejo de las emociones, la empatía, el autocontrol, el optimismo y la curiosidad. El cerebro es una máquina de aprendizaje.
Quienes la conocen dicen que lo que vive hoy es simplemente una nueva vuelta de tuerca a esa antigua obsesión por todo lo que sucede dentro de la sala de clases; la misma que la llevó a cofundar Enseña Chile, una organización que se dedica a reclutar profesionales jóvenes para que trabajen en los colegios más vulnerables del país. Una labor que dejó hace siete años, cuando se fue a estudiar a Estados Unidos un doctorado en Economía de la Educación.
-Siempre dije "ni muerta quiero dedicarme a esto" (estudiar un doctorado), porque yo quería trabajar en cosas concretas, que generaran cambios ahora. Pero después de años de trabajo práctico di la vuelta completa, necesitaba pasar al otro nivel, uno en el que empiezas a documentar las cosas que ves que sirven y a evaluar qué tan buena es una política pública, cuál fue su impacto. En Enseña Chile siempre hicimos las cosas de manera cuantitativa, porque yo soy ingeniera, pero lo hacíamos de modo artesanal, había que aprender cómo realizarlo bien y eso se hace en un doctorado -explica.
Susana Claro volvió a...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba