Ciudad de México, una belleza congestionada y caótica - 21 de Enero de 2018 - El Mercurio - Noticias - VLEX 701312505

Ciudad de México, una belleza congestionada y caótica

Con estas palabras el escritor y periodista Alberto Fuguet describía a Ciudad de México en un artículo publicado en Revista Domingo, a inicios de 2008. En esa crónica el autor de "Tinta roja" delineó de manera certera este caótico y laberíntico paisaje. "Dependiendo del ánimo de tu interlocutor, el Distrito Federal es la tercera metrópolis más grande del mundo (lejos la ciudad más grande de América) o bien es una bestia que crece, muta y se expande cada segundo en esta tierra que antes fue un lago y que no es para débiles ni para edificios muy altos. El bellísimo Palacio de Bellas Artes, de hecho, se hunde un poco cada año".

Alrededor de nueve millones de personas han hecho de este desordenado espacio geográfico su residencia. Una ciudad donde, además -y podemos dar fe de ello- el transporte público y el tráfico son un desafío permanente tanto para el habitante local, como para los numerosos turistas que la visitan a diario.

"Lo cerca está a hora, hora y media. Lo lejos, mejor ni tocar el tema. Quizás aquí los barrios se llaman colonias porque tienen algo de colonia penal: de ahí no sales. La vida social y las amistades se forjan en torno a las colonias. Ir a visitar a un amigo al otro lado de la ciudad implica que ese lazo es más que fuerte. Un día fui invitado a comer a Polanco. Calculé media hora. Llegué una hora tarde. A nadie le pareció mal", sentencia el autor de "Missing".

La arquitecta María de Lourdes García Vázquez, profesora titular de la Universidad Autónoma de México (UNAM) y autora de diversos estudios sobre urbanismo, adelanta a Artes y Letras, que "en la época de los aztecas habían barrios, los que a su vez estuvieron divididos según los oficios: alfareros, zapateros, carpinteros y agricultores. En la Colonia esos barrios se empezaron a llamar colonias".

La profesional destaca a Mario Pani (1911-1993) como uno de los grandes artífices del rostro moderno de esta ciudad. Buena parte de las innovaciones urbanas y arquitectónicas de mitad de siglo XX en México llevan su sello. "Fue discípulo de Le Corbusier. Gracias a él los tradicionales barrios coloniales con viviendas unifamiliares, con comercios y escuelas se transformaron en grandes conjuntos habitacionales. Hoy, en el Estado de México tenemos conjuntos habitacionales de cinco mil o diez mil viviendas, sin comercio ni producción", dice.

La docente de la UNAM añade que dos millones de viajes diarios se realizan desde los alrededores hacia la Ciudad de México. "Lo que hace...

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