Cita de los obispos a Roma anticipa cambios profundos en la Iglesia Católica chilena
Solo un punto de la agenda permaneció intacto ayer en Punta de Tralca. Estaba pactado que los obispos, en su asamblea plenaria, recibieran al ministro secretario general de la Presidencia, Gonzalo Blumel, para conocer los lineamientos del Gobierno en temas como identidad de género. Y así fue, pero tras la hora y media que duró la reunión, el foco de las conversaciones volvió a ser el mismo que ha sido desde la mañana del miércoles: la carta de Francisco.
La misiva enviada directamente a la Conferencia Episcopal para citar a los obispos chilenos a Roma y allí revelarles las decisiones tomadas luego de leer el informe del arzobispo Charles Scicluna, sobre los testimonios que recogió en Santiago, fue el centro de todas las reuniones de ayer. Y es el motivo de que hoy, a toda máquina, los prelados deban abordar los temas que originalmente debían zanjar estos días, como el próximo Congreso Eucarístico y la elección de delegados para futuras actividades.
Según comentaron asistentes a Punta de Tralca, la sensación generalizada entre los obispos era de impacto. Esperaban nuevos nombramientos, aceptaciones de renuncia, pero no una invitación.
Más allá de las sesiones oficiales, el retiro ha permitido que los obispos tengan la oportunidad de compartir de modo más informal. La mayoría, por ejemplo, se reúne para ver las noticias, y así lo hicieron la noche del miércoles, atenta a la cobertura que tuvo la misiva papal.
Cercanos a Barros aseguraron que ayer lo vieron más tranquilo y reposado. El cambio en el ánimo también habría sido perceptible en otros obispos que estuvieron vinculados al ex párroco de El Bosque Fernando Karadima. "Ahora, no es que ellos estén mal y los demás estén bien. No hay ninguno que esté sacando cuentas alegres; más bien hay una disposición a ver lo que nos toca", comentó una fuente de la Iglesia.
Una cosa es clara: Juan Barros confirmó que irá a Roma, tal como el resto de los obispos. "Todos los que están aquí han manifestado que van", afirmó el vocero de la Conferencia Episcopal, Jaime Coiro.
Las interrogantes
"He incurrido en graves equivocaciones de valoración y percepción de la situación, especialmente por falta de información veraz y equilibrada". Así dijo el Papa en su carta y la interrogante continúa siendo quién lo informó mal. Los canales más conocidos son los obispos y el nuncio. En conversación con Radio Agricultura, monseñor Fernando Ramos afirmó: "Evidentemente, la que es más responsable de la relación entre las...
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