Cinco territorios del canto a lo divino en cinco discos - 24 de Diciembre de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 830339385

Cinco territorios del canto a lo divino en cinco discos

La virgen realiza una peregrinación incesante durante cuatro meses. Desde que sale del templo en lugares del valle del Quilimarí, día a día, de casa en casa, convocando familia por familia. Toda la comunidad se vuelca a esa práctica de devoción. "Parte el 1 de noviembre y vuelve en marzo. En Chincolco sale el 15 de agosto y vuelve en enero. En Longotoma la fiesta popular está de mayo a julio. Una familia pide que vaya a su casa. La virgen llega a las 4 de la tarde, y ahí están entonces los cantores. Al otro día la imagen sale de esa casa a las 4 de la tarde para ir a otra. Y ahí están los cantores otra vez para celebrarla", dice Daniel González.Junto con el también antropólogo Danilo Petrovich han recorrido localidades donde se palpita esta práctica del mundo campesino: el canto a lo divino, expresión que utiliza las décimas como instrumento poético para abordar temáticas de la religiosidad popular, relatos bíblicos y otros textos sacralizados. "No solo se distingue uno de otro por las décimas y su contenido sagrado, sino también por cómo se toca y canta. Son un sinnúmero de entonaciones que cambian según el lugar", dice Petrovich.Ambos investigadores delimitan ese Chile del canto a lo divino entre las provincias del Choapa y Linares, donde hoy existen unos mil cultores. Y siguiendo el flujo de los ríos Choapa, Aconcagua, Maipo...

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