'El chivo expiatorio fui yo'
El 10 de marzo , a eso de las 7 de la tarde, Cristián Campos, actor, 64 años, estaba en su pieza. Se sentía mal, producto del coronavirus que le habían diagnosticado 11 días antes. Fue entonces cuando recibió la primera noticia.-Era un mensaje de una periodista. Me puso: "Hola, te escribo para corroborar si es efectivo que Tomás falleció".Se refería a Tomás Vidiella. El actor había dado positivo el 2 de marzo, tras un examen PCR que también se realizó todo el equipo de la obra Orquesta de señoritas . Esto debido a que Campos, parte del elenco, les avisó que estaba contagiado.-Fue una sorpresa. Yo sé que Tomás tenía 84 años y antecedentes de enfermedades al pulmón, pero fue una sorpresa total. Esa mañana nos habían dado el informe de que estaba bien, que no era necesario intubarlo y que estaba usando su celular. Yo, ese día, justo me había quedado con la idea de que había zafado.Sentado en la terraza de su departamento en Las Condes, el actor recuerda:-Entró la María José (Prieto) a la pieza, yo estaba llorando, y le digo: "No puedo creerlo, si estaba bien esta mañana"... Una persona que habías visto los últimos tres meses todos los días, que te habías reído con él... era imposible trabajar, te levantaba una ceja y uno no podía contener la risa en plena función. ¿Ese huevón había muerto? No lo podía creer.Relata que al rato recibió en su celular el mensaje de una amiga: "Qué lástima lo de Tomás y qué lata que te estén tirando mala onda por Twitter". Luego lo llamó Luciano Cruz-Coke, y le dijo algo parecido.-A esas alturas, no entendía nada. No había visto Twitter porque yo estaba con la muerte de Tomás en mi cabeza, con todas sus imágenes que se me venían a la mente, pero ahí ya me metí a Twitter.Lo que vio, dice, lo dejó helado.-No alcancé a integrar la noticia, cuando vi un tuit que decía: "Tú lo mataste, no vas a poder vivir con tu conciencia, vas a tener que irte del país". No conocía a la persona que había escrito eso y lo único que pensé fue: "¿Por qué dice que lo maté yo?, ¿qué es esto?".En marzo de 2019, apenas se declaró la pandemia, Cristián Campos partió junto a su mujer María José Prieto y su hija Julieta a Tunquén. Lo hicieron para protegerse del covid, explica, y también porque por primera vez en su vida estaba cesante: en diciembre de 2018, tras 40 años en Canal 13, había sido despedido.Seis meses después, pasados los períodos de cuarentena en Santiago, decidieron volver, principalmente porque el actor debía buscar trabajo.-Todo el año pasado estuvimos comiéndonos los ahorros que tenía guardados para mi vejez. No fue fácil, yo soy súper aprensivo con el tema de la plata, le tengo un "miedo inconcebible a la pobreza", como dice mi mujer. El trabajo de actor es súper inestable, y no lo vivo con mucha serenidad, pero gracias a Dios está fue mi primera cesantía.Por eso, cuando le ofrecieron actuar en Orquesta de señoritas , que sería dirigida por Álvaro Viguera y que marcaría la reapertura del Teatro Oriente con público presencial, aunque con un aforo reducido a 75 personas, aceptó.-Una de las principales razones fue porque llevaba un año cesante -insiste.La obra trataba sobre una orquesta de seis mujeres que sobreviven tocando para los visitantes de unas termas en la posguerra de la Segunda Guerra Mundial. El elenco era de lujo: Luis Gnecco, Willy Semler, Tomás Vidiella, Mauricio Pesutic, entre otros, además de un equipo que incluía a Patricio Araya, quien haría las pelucas para los actores, y a Pablo Núñez en el diseño.-Eran puros cracks , además era trabajo y bien pagado. Así es que no lo dudé.- ¿En ningún momento pensó que podía ser peligroso?-No, estábamos en fase 4. Yo me cuido harto, porque tengo bronquitis tabáquica por haber fumado mucho; entonces, siempre fue una preocupación esto del coronavirus. Pero ahí el Ministerio de Salud había dicho que se podían hacer algunas actividades con todos los cuidados. Y uno veía que en esta fase 4...
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