Chilenos que estuvieron con el Papa califican su renuncia como un acto 'noble' y 'heroico' - 13 de Febrero de 2013 - El Mercurio - Noticias - VLEX 419780946

Chilenos que estuvieron con el Papa califican su renuncia como un acto 'noble' y 'heroico'

Vivian Galleguillos

La mujer del milagro de Alberto Hurtado

"Tenía una mirada cansada, de mucha pasividad. Una mirada dulce y carismática". Así describe Vivian Galleguillos a Benedicto XVI, cuando lo vio y recibió de sus manos la hostia en la Plaza de San Pedro del Vaticano, en octubre de 2005, con ocasión de la canonización de San Alberto Hurtado.

Ella fue invitada a la ceremonia ya que en 1996, un accidente de tránsito la dejó en estado de coma. Luego despertó milagrosamente y el hecho fue adjudicado a al padre Alberto Hurtado y así fue canonizado.

A propósito de Benedicto XVI, Galleguillos dice que, él es distinto a como se ve en televisión. "Tuve la oportunidad de estar cara a cara con él. Es una persona que se ve más dulce de lo que parece por la televisión. Cuando llegó al papado, mucha gente decía que era muy frío, pero en verdad no, tiene una mirada súper dulce", comenta. Destaca la labor que el Papa realizó por superar los casos de abusos sexuales en la Iglesia. Sobre la renuncia, resalta la nobleza de ese acto como una señal de modernización de la Iglesia y de que se está ante seres humanos.

Luis Urzúa

Jefe de turno el día del accidente en la mina San José

La renuncia como un mensaje para los católicos. Esa es la interpretación que da Luis Urzúa a la dimisión de Benedicto XVI.

"Está dando una señal de que él es un ser humano y se va para que vengan otras personas con mayores energías, para que se hagan cargo de la Iglesia", dice.

El minero fue invitado por el Vaticano al inicio del Año de la Fe, en octubre de 2012 por haber sido uno de los 33 mineros que estuvieron atrapados en la mina San José más de dos meses, entre agosto y octubre de 2010. Urzúa se desempeñaba como jefe de turno en la faena al momento del accidente.

Cuando lo vio, el minero le entregó algunos presentes que llevó desde Chile. Después de ese encuentro en 2012, Urzúa se ha convertido en uno de los últimos chilenos que estuvo cerca del Papa Benedicto XVI.

En ese momento, cuenta que "hablamos y nos preguntó cómo estábamos y cómo estaban nuestras familias".

"Él hablaba en castellano y se acordaba de todo. Cuando mandó un saludo a nuestro país, yo le dije 'espero que pronto lo tengamos en Chile', y él me hizo una risita, como diciendo a lo mejor".

Jaime Coiro

Vocero de la Conferencia Episcopal

Como una infinita bendición. Así califica Jaime Coiro el encuentro que tuvo con Benedicto XVI en 2010, en el marco del Congreso Mundial de la Iglesia Católica. Ese día le tocó...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR