Director del CEP plantea que solo colegios de bajo rendimiento estén obligados a no lucrar
Hoy, el proyecto establece que ningún establecimiento puede lucrar y que, además, en un plazo de dos años se deben transformar en fundación. Esto, siempre en una búsqueda de mejorar la calidad de la enseñanza.
Sin embargo, Harald Beyer, director del Centro de Estudios Públicos (CEP), sostiene en un documento hecho para esa institución que "no hay grandes diferencias en los desempeños de los colegios, liceos y escuelas de acuerdo a la forma en la que están organizados". Añade que "en un mundo con escasez de calidad, la política educativa debería ser capaz de distinguir y no generar tensiones innecesarias en los colegios que están teniendo buenos desempeños".
Por lo mismo, el también ex ministro de Educación propone que no todos los colegios particulares subvencionados con fines de lucro se transformen, sino solo aquellos que tienen un mal desempeño en las pruebas Simce, y considerando el nivel de vulnerabilidad de sus alumnos.
"Cuando se plantea el término del lucro es para que esos recursos se reinviertan y existan buenos resultados, pero si ya los hay y además hay bastante inercia en estos, no tiene mucho sentido hacerlo pasar por ese cambio", explica.
Beyer agrega que "para los que están con peores desempeños, propongo que se cumpla el plazo que está en el proyecto de ley, que estipula dos años para transformarse en fundación".
De ser así, se estima que serían cerca de 600 colegios los que en un primer momento deberían convertirse en fundación, los que educan a cerca de 140 mil niños, y no los 2.500 que se calculan con el actual proyecto de ley.
La propuesta del director del CEP habla de la existencia de un segundo grupo, también con bajo rendimiento en el Simce. Ellos tendrían un plazo de seis años para mejorar esa situación, "y si no lo logran, se tienen que convertir en fundación", dice.
Otro punto que aborda el académico es que se siga permitiendo la apertura de colegios. Hoy, el proyecto establece que solo se podrán abrir nuevos establecimientos si hay una demanda insatisfecha en la zona. Sin embargo, ese punto "siempre va a ser discrecional", según Beyer.
El director del CEP señala en su propuesta que "es entendible la preocupación por el efecto agregado que genera un nuevo establecimiento en una zona con amplia oferta escolar. Se teme que, al restarles matrícula a otros establecimientos, se debilite el financiamiento".
Sin embargo, afirma que otro aspecto a considerar son las localidades que no tienen...
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