Casos de víctimas de atentados que fallecieron sin recuperar sus bienes reabren debate por ley de reparación - 17 de Enero de 2022 - El Mercurio - Noticias - VLEX 881617683

Casos de víctimas de atentados que fallecieron sin recuperar sus bienes reabren debate por ley de reparación

Ocho meses después del atentado incendiario que destruyó por completo la casa que había construido a lo largo de 30 años, en el balneario de Quidico, al sur de Arauco, falleció el contador Patricio Fontecilla luego de sufrir un infarto.El profesional, de 78 años, había llegado en la década de 1960 a la actual Región de Biobío, como parte de los equipos de la Corporación de Reforma Agraria (Cora). A comienzos de los 90, junto a su familia, decidió radicarse en esa zona costera y comenzó a edificar la casa de dos pisos, la que en abril pasado se incorporó a la lista de inmuebles destruidos por el fuego y que ya bordean los 70.En esa área opera el movimiento Resistencia Mapuche Lavkenche, que busca expulsar a los vecinos más antiguos para lograr el control territorial del lugar. Junto a la quema de viviendas mantiene tomada una decena de propiedades.La familia de Fontecilla relató que "el atentado fue un golpe demoledor para él" y aseguró que "nunca logró reponerse de ese impacto y entró en una profunda depresión". Su entorno dejó en claro que "nunca tuvo problemas al corazón, así es que su muerte es una clara consecuencia de todo lo que sufrió en los últimos meses", afirmaron. También comentaron que "había comprado pasajes para realizar un viaje familiar el 14 de febrero". En su homenaje y recuerdo, sus amigos lo concretarán.El doctor en Psicología y director del Laboratorio de Estrés y Salud de la Universidad de La Frontera, Manuel Ortiz, expuso que, luego de que se produce un cuadro de estrés por episodios como los que sufren las víctimas de la violencia, "si hay una afectación se requieren terapias de, al menos, seis sesiones, pero existen otras variables de la persona que pueden llevar a que estas situaciones se evidencien con más dolor o con mayor impacto psicológico que altere más su funcionamiento cotidiano".A juicio de Ortiz, "una de las razones por las que se tiene que derivar (a un profesional) se da cuando el paciente autorreporta que el evento traumático no le permite seguir viviendo su vida con la misma naturalidad que tenía antes y se interrumpe la rutina familiar y laboral, y cuando todo eso se afecta la persona necesita atención. Dependiendo de cuántas áreas se vean involucradas, las terapias pueden ser más amplias y, en algunos casos, se hace necesario que los psiquiatras hagan su parte".Organizaciones de afectados por atentados incendiarios coincidieron en que el caso de Fontecilla, que se suma a los de otras personas que...

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