Campanas del silencio - 1 de Abril de 2020 - El Mercurio - Noticias - VLEX 842524166

Campanas del silencio

Con paciente serenidad tomé la ausencia de misa el domingo pasado.Sentí, eso sí, cierta molestia espiritual. A las 9:30 de la mañana me asomé al jardín a escuchar las campanas, pero callaron. A las 9:45 esperé el segundo llamado... silencio. Un cuarto de hora después oí unas campanadas, pero no, era el anuncio de que ya eran las diez de la mañana. Me consolé porque, antes, había seguido la misa por televisión.Desde hace setenta años que asisto, domingo a domingo, a esta ceremonia tan vital en mi vida. Recordé mi época de acólito, cuando, junto a mi amigo Pancho y antes del Concilio Vaticano II, entrábamos junto al celebrante y al pie del altar él decía:- Introibo ad altare Dei.Y nosotros, muy solemnes, seguíamos:- Ad Deum qui laetificat juventutem meam.Lamento lo de la misa. Hay quienes ven en su desaparición...

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