C) Factores mentales
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CRIMINOLOGÍA
C) FACTORES MENTALES
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LITERATURA, PERIÓDICOS, PELÍCULAS
Literatura1
Con f recuenc ia se af irma que l a mala l iteratu ra es un p oderos o factor
criminógeno, comenzando con las novelas de aventuras sangrientas del sig lo XVIII,
continuando con las historias y descripciones eróticas y pornográficas, los folletines
de Pieles Rojas y otros terror íficos de po co coste y terminando con las historias de
criminales y de detectives en las cuales aquéllos figuran como héroes y están llenas
de episodios s anguinarios.
El efecto criminóg eno más destacado atribuido a la liter atura barata es la
perniciosa influencia sexual sobre los jó venes, en particular a causa de la excitación
erótica producida por relatos obscenos; y después el estímulo de tendencias crimina-
les y la destrucción de inhibiciones mediante descripciones atrayentes de carreras
criminales rodeadas de una atmósfera de aventuras y excitación tan opuestas a la
sosa monotonía de la vida honesta. Se admite que dichos efectos perniciosos actúan
en particular sobre personas jóvenes a quienes la excesi va lectura de mala literatura
también impide emplear sus ocios en actividades higiénicas. Un efecto criminógeno
más directo de tales lecturas consi ste e n qu e la descr ipción de un determinado
delito puede actuar como una sugestión directa y que un procedim iento técn ico
también concreto pueda ser llevado a la práctica por el lector.
No hay duda que la influencia de tal literatura puede ser funesta. Por otra
parte parece que se ha exagerado algo y que la l lamada mala literatura incluso
tiene efectos secundarios edificantes que, hasta cierto punto, equilibran su influen-
cia adversa, en particular en cuanto desvía las tendencias criminales trasladándolas
al país de la fantasía y encontrando en él su s atisfacción. Se admite gener almente
que tal desviación es posible en el autor en relación con sus impulsos activos, y
solo basta dar un paso más para suponer lo mismo para el lector.
1SIGHELE,Littérature et criminalité, París, 1908; MAX HOMBURCER,Der Einfluss der Schundliteratur auf
jugendliche Verbrecher und Selbsmörder, MfK, 1909-10, pp. 145 y ss.; ERWIN UMHAUER,Die Bekä mpfung
der Schun dlitera tur, MfK, 1910- 11, pp. 585 y ss.; ALBERT HELLWI G,Die Bez iehungen zw ischen
Schundliteratur, Schundfilms und Verbrec hen, Gross, Archiv fiir Kriminalistik, Bd. 51 , 1913; LOUIS
LE MAIRE,L’importance de la littérature comme facteur criminogène, Fetskrift for Helweg, Cope nhague,
1946, pp. 585 y ss.
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