Buscando entender la crisis - 26 de Octubre de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 820617561

Buscando entender la crisis

La impaciencia por encontrar respuestas a la compleja situación de violencia, así como a las manifestaciones de protesta que se suceden, parece estar atentando en contra del análisis reflexivo, necesario para atender eventos de crisis.Diversos sectores han planteado que la situación se habría provocado por falencias estructurales del "modelo" de desarrollo, las que le impedirían satisfacer las aspiraciones de la ciudadanía. Sin embargo, el análisis acucioso de nuestra historia reciente desmiente tal diagnóstico. Los ajustes necesarios en distintas áreas no deben desembocar en el derrumbe de los pilares que permitieron los mayores avances en el bienestar de los chilenos en nuestra historia.Auge y estancamiento del progresoDe la mano de instituciones que promovieron la estabilidad macroeconómica, la apertura comercial, la competencia y el emprendimiento, la economía chilena registró una sólida expansión promedio anual de 5,2% entre 1990 y 2013. Este robusto desempeño y el levantamiento de una extensa red de protección social -fruto de los recursos derivados del crecimiento- posibilitaron que Chile disminuyera sus índices de pobreza desde el 40% hasta el 8%. Hoy la clase media representa una fracción mayoritaria de la población, y cerca del 70% de quienes residen en el país considera tener una vida mejor que la que tuvieron sus padres.Esa tendencia se vio interrumpida a partir de 2013. Una compleja situación internacional primero y luego las contraproducentes políticas introducidas por el gobierno de la Nueva Mayoría significaron un modesto crecimiento económico de 1,8% entre 2014 y 2017. Y como era esperable, la pobreza desaceleró su caída. Por su parte, la desigualdad, que se venía reduciendo desde 2000, exhibió un comportamiento similar. Las expectativas de seguir avanzando de los segmentos de ingresos medios y bajos sufrieron un duro revés.Paralelamente, bienes altamente sensibles para los hogares experimentaron importantes alzas. Así lo mostró el IPC de la salud, y también los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas, que entre 2014 y 2017 aumentaron a una media anual de 4,8% y 5%, respectivamente. Estos encarecimientos fueron particularmente perjudiciales en un contexto de expectativas mermadas y crecimiento de salarios reales menores a los de antaño (2,1% promedio, entre 2012 y 2017).Los ánimos mejoraron con el arribo de la segunda administración de Sebastián Piñera. En 2018 la inversión presentó una vigorosa recuperación y el...

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